Cocina [Puerto Lumbreras_ Centro de Visitantes Castlilo de Nogalte]
Cocina
Panel explicativo [Puerto Lumbreras_ Centro de Visitantes Castlilo de Nogalte]
Panel explicativo

Historia

El Centro de Visitantes del Castillo de Nogalte en Puerto Lumbreras se ha situado en lo alto del cerro del Castillo y en el interior de una casa-cueva. El contexto de las casas-cueva es magnífico para comprender la historia reciente del pueblo.

Los habitantes con menos recursos económicos fueron horadando la montaña hasta realizar sus casas-cueva. El poblamiento espontáneo de los cerros con estas viviendas atrajo a nuevas familias al pueblo. El crecimiento de la población permitió el desarrollo de la agricultura y cierta industria.

Dado el carácter humilde de sus habitantes, las casas eran muy austeras.

El interior de una casa solía poseer: esteras de esparto, vajillas de vidrio y cerámica rústica, sillas, lámpara de aceite y alguna jarapa.

El conjunto histórico, arqueológico, etnográfico y paisajístico del castillo y el hábitat rupestre de las casas-cueva está protegido bajo la ley de Patrimonio Histórico Español. El Castillo de Nogalte recibió la catalogación de Bien de Interés Cultural (BIC). El perímetro delimitado bajo esta protección en torno a la fortaleza es de 17,4 hectáreas en el Cerro del Castellar.

Con el traslado del Museo de Grafología Augusto Vels a una casa-cueva, la zona del cerro del Castillo se convertirá en un epicentro de la cultura lumbrerense. Todo esto aporta una valor añadido a la atractiva visita turística de la zona.

Arquitectura

La superficie con la que cuenta el Centro de Visitantes es apenas de 25 m cuadrados, que es el espacio de que disponían muchas de estas casas.

La construcción de las cuevas era muy rudimentaria. A partir de la horadación de la pared se iban creando las estancias. Los elementos arquitectónicos son inexistentes. No hay columnas, ventanas, puertas, pilares ni bóvedas. Al construirse por medio de la excavación, se va creando espacio conforme se perfora la montaña.

El problema era la ventilación y la entrada de luz natural. Buscando crear una corriente de evacuación de gases, se crearon las chimeneas verticales, que se pueden ver sobresaliendo en el monte.

La distribución interior del espacio se hacía en pequeños habitáculos a partir de una sala principal.

El Centro de Visitantes ha respetado la construcción original de una casa-cueva para realizar en ella una moderna exposición. Se pueden ver recreados, intactos, el ambiente y la forma de vida de los antiguos pobladores.