Nuevos tambores para nuevos tamboristas [Moratalla_Semana Santa]
Nuevos tambores para nuevos tamboristas
Tamboristas con túnica oscura [Moratalla_Semana Santa]
Tamboristas con túnica oscura

El vestuario

La Túnica

Se trata de una prenda descolorida y casi ajada por el uso, sin llegar al deterioro. Casi siempre de un solo color, suelen ir cosidas con remiendos imitando motivos profanos o sagrados como la propia Cruz de Cristo. Se abrochan por la parte delantera, portándose antiguamente  una pequeña cola que ha ido desapareciendo y se ha sustituido por volantes.

El Capuz o Capirote

Tapa por completo la cara del tamborista y a veces no coincide con el color de la túnica. Puede tener tres aberturas: ojos y boca. El capirote suele llevar un cucurucho de cartón para que quede de punta. Si no lo lleva es normal que el capuz caiga hacia un lado de la cabeza.

El Toque del Tambor

La característica principal del toque del tambor en la ciudad de Moratalla es la anarquía en los sonidos, además de la posición vertical del tambor para tocarlo. Es la personalidad del tamborista la que se ve reflejada en su toque. Tal es así que en algunas ocasiones se reconoce a una persona determinada por su toque. Debido a este individualismo, el sonido dependerá en muchas ocasiones del estado de ánimo del nazareno.

El toque puede seguir el mismo ritmo durante toda la jornada, o alternar diversos toques con cambio de intensidad. Pero en Moratalla todos buscan contraponer sus golpes a los de otros tamboristas para hacer destacar el suyo. La posición vertical del tambor obliga a un peculiar giro en la muñeca y en la mano de la parte superior, evitando que el tamborista adopte una posición totalmente vertical.

El uso de los palillos

El palillo de arriba toca repetidas veces la piel superior con un ritmo suave. Mientras el palillo inferior alterna los grandes mazazos con golpes más débiles.

Los desafíos

Se trata del enfrentamiento informal de dos tamboristas con sus respectivos tambores.

En medio de una marabunta de gentes y tambores, dos tamboristas quedan uno frente al otro y se cortan el paso. Los bordones de sus tambores quedan enfrentados y comienza el duelo para que se decida quien es mejor con el toque del tambor.

¿Cuánto dura el desafío?. Nunca se sabe. Desde unos segundos por la desigualdad en las fuerzas, la técnica y el sonido de uno de ellos; hasta horas por el equilibrio de fuerzas y la tenacidad de los dos contrincantes.