Situados en el municipio de Lorca en las estribaciones de la Sierra del Pericay. Están en las proximidades de la Rambla de la Fuente y Fuente Gil; en la actualidad suelen servir de refugio a grupos de jabalís salvajes.

El paraje en el que se ubica está cubierto de pinos y aparte de las ramblas que lo cruzan hay un resalto por el cual en tiempos pasados debía de caer una cascada de agua que serviría de abastecimiento para los pobladores que pudieron residir en los abrigos desde los cuales se pueden divisar todos los alrededores siendo un lugar estratégico para la caza pudiendo controlar el paso de animales típicos de la zona, como los jabalíes, liebres, muflones, etc.

Determinar la cronología de estas pinturas es, como en la mayoría de las estaciones rupestres, muy complicado. Sin embargo junto a los abrigos se localizaron algunos restos cerámicos de época eneolítica que ha ayudado a establecer el período de uso de estos abrigos.