Sabina Milenaria [El Sabinar]
Sabina Milenaria

El paisaje del paraje de El Sabinar muestra relieves del prebético con amplios pliegues de calizas, dolomías, areniscas y margas, distribuidas a lo largo de las sierras de más de mil metros de altura que componen el paisaje de esta pedanía, y entre las cuales destaca la del Zacatín, el collado de Cibarroya o el cerro de Castellar.

Hay que hacer mención de los paisajes kársticos que componen la naturaleza de El Sabinar, en los calares de la Santa y Cueva de la Capilla, así como en Hoya Campuzano.

Por un meandro próximo a El Sabinar discurre el tramo superior del río Benamor que nace al pie de la sierra de Zacatín.

Pero si por algo destaca esta pedanía es por la especie arbórea que le da nombre: la sabina albar o trabina, Juniperus Thurifera, árbol de copa densa y forma cónica, de madera aromática, (thurifera significa "productora de incienso") y apreciada para labores de carpintería por su dureza y resistencia a los insectos.      

Esta especie es propia de terrenos calizos y zonas de una altura superior a los 800 metros. Los parajes de esta pedanía poseen algunos ejemplos centenarios que han sido declarados patrimonio de la humanidad.

En cuanto a la fauna de estos parajes se pueden observar halcones peregrinos, búhos reales y chovas piquirrojas.