José Fuentes Cano, conocido entre los vecinos de Blanca como 'el Padre Pepe', es uno de los más ilustres personajes de esta localidad murciana.

Su trabajo está orientado hacia los más necesitados y su labor en zonas del Tercer Mundo es incansable, con el fin de sacar de la pobreza y la marginación a las personas que más lo sufren.

El Padre Pepe es un sacerdote que ya desde niño sintió la llamada de Jesús.

Nacido y educado en Blanca, marchó hacia Murcia con quince años con el fin de ser ordenado sacerdote algún día. Su deseo se hizo realidad cuando en 1986 fue investido como tal por el obispo de la Diócesis de Cartagena ante todos los vecinos de su Blanca natal.

Tras una estancia de tres meses en la ciudad de El Alto en Bolivia, decidió regresar a ella con el fin de realizar allí su misión pastoral a través de una gran multitud de proyectos sociales.

Su trabajo ha sido reconocido por sus vecinos, nombrándole Hijo Predilecto, pero quienes más se lo agradecen son los indígenas de la ciudad de El Alto en Bolivia, donde su labor les ayuda a sobrevivir diariamente y a realizarse como personas.