Raspay rinde culto a sus patronos a finales de junio. La procesión con las imágenes del Sagrado Corazón de Jesús y el Dulce Corazón de María constituye uno de los actos centrales de estas fiestas, aunque también se pueden destacar algunas actividades lúdicas como la Feria Infantil, la chocolatada o el tradicional juego de la cucaña.

Cuentan con un fin de semana de duración, donde los actos religiosos conviven con los ya tradicionales bailes nocturnos a los que acuden los habitantes de la localidad y de toda la pedanía.

La imagen de San Isidro Labrador también es querida y venerada en Raspay, y se le rinde culto el 20 de mayo con un día de convivencia en la Plaza Pedáneo Ricardo Yáñez.

Los diferentes grupos y peñas del pueblo y de fuera de él preparan paellas con los ingredientes que les facilita el Ayuntamiento de Yecla. Por la tarde, la imagen se lleva en procesión por las calles de la localidad acompañada de varias carrozas que son realizadas por los mismos habitantes de Raspay, exceptuando una elaborada por las Peñas de San Isidro Labrador de Yecla.