La familia Bárcida funda Qart Hadast y domina el litoral

  A partir del siglo IV a.C. los cartaginenses, bajo el mando de la familia de los Barca, dominan todo el Sureste peninsular, siendo las tierras de la actual diputación del Rincón de San Ginés (Cartagena) una excelente fuente de recursos económicos para los bárcidas, ya que con la explotación de las minas del litoral cartagenero podían sufragar los gastos que les ocasionaban sus guerras contra Roma. Los cartagineses también introdujeron nuevas técnicas de cultivo en los campos de la diputación. Fue la época de las nuevas industrias, que trabajaban con fibra de esparto.

  La presencia romana en el Rincón de San Ginés: el mar como fondo

  Tras la conquista romana de la ciudad de Cartagonova en el siglo III a.C. surgieron numerosas poblaciones costeras relacionadas con el trabajo de los productos del mar o con la minería, siendo hallados los restos de una factoría de salazones entre las actuales poblaciones de Los Nietos y Playa Honda. Carthago Nova fue muy rentable para la República y el Imperio romanos por los ingresos que obtenían de la explotación de las minas de la zona. Hasta 40.000 personas llegaron a trabajar en las explotaciones, contribuyendo al poderío económico de Roma durante el siglo II a.C.

  Uno de los poblados creados por los romanos como consecuencia de la actividad minera es El Castillet. Se trata de un yacimiento en el sector más oriental de la Sierra Minera, en el que se ha encontrado en sucesivas excavaciones arqueológicas un edificio de carácter residencial con dependencias anexas. Por su situación se considera el lugar como un punto de salida de productos mineros y de abastecimiento marítimo de las comunidades vecinas implicadas en la extracción minera y la producción agraria. En una zona de la costa muy cercana a este enclave minero, concretamente en Cala Reona, se hallaron los restos del naufragio de un barco datado entre los siglos V y VI. El cargamento de este barco consistía en ánforas de salazón.