La pasión tardía de Salvador Dalí es una exposición que recoge cincuenta y una esculturas de la Colección Clot , encargadas al artista por el empresario y coleccionista Isidro Clot y cuyos derechos fueron adquiridos por la empresa Diejasa en 1982. Las piezas expuestas, encarnan la expresión artística de los últimos años del maestro, corresponden, a la plena madurez del artista catalán, a sus últimos años de trabajo.

Debemos recordar que en 1982, al morir su esposa y musa, la más fuerte inspiración a lo largo de su vida, Salvador Dalí dejó de crear.

Uno de los atractivos de la exposición, es que se tratan, en su mayoría, de las únicas esculturas creadas completamente por Salvador Dalí sin el apoyo de otros artistas o artesanos. Realizadas durante la década de los años 70, en moldes de cera, por las propias manos del artista catalán. Ya que otras obras producidas en distintas épocas, y también reconocidas como parte de las realizadas por el artista, fueron en realidad diseñadas por éste, pero ejecutadas por otros artesanos que lo hicieron por encargo del maestro.

Se podrán contemplar una serie de piezas inspiradas en el clasicismo, siempre presente en la obra daliniana, y otras que se sumergen en el surrealismo más profundo. Se entremezclan los temas que siempre obsesionaron al artista a lo largo de su vida: la mitología, la religión, la mujer y Don Quijote.

Genio, contradictorio, exótico, simbólico y llamativo son algunos de los tantos adjetivos que caracterizan al maestro de Figueras. Su personalidad siempre despertó gran interés y descubrir todos sus secretos parece casi imposible.

Queremos que el espectador se adentre en el trabajo de Salvador Dalí como escultor, que admire, como el maestro del surrealismo, interpreta y plasma en formas volumétricas temas clásicos como San Juan Bautista, Santa Teresa de Jesús y un Cristo en la Cruz entre otros. O, como se las ingenia para acercarnos a la idealizada diosa de la belleza y del amor a los días que estamos viviendo, sustituyendo la renacentista concha de Boticcelli por una mera toalla.