Hierbas y Matas

    Arbusto pequeño (o mata grande), perenne, cubierto de abundante pilosidad, más folioso en la parte inferior, de tallos cuadrangulares, casi blanquecinos por pelos muy numerosos, con cantos glabros y redondeados. Hojas verde glaucas, con frecuencia de tonalidad amarillenta,profundamente divididas (pinnatipartidas o pinnatisectas), con lóbulos estrechos, de hasta 5 cm de longitud. Flores agrupadas dos a dos en verticilastros opuestos y alternos, densos, tanto que aparentan una espiga alargada, sin penacho de brácteas al final de la inflorescencia. Corola sobresaliente de la espiga, de hasta 1,5 cm, tubular, violácea, abierta en labio superior bilobulado e inferior trilobulado, con los cinco lóbulos maculados por línea central de mayor intensidad de color. Fruto de tipo núcula, de aproximadamente 1,5 mm.

Hábitat y distribución

   Crece en laderas secas y pedregosas, taludes, etc., preferentemente en terrenos calizos, algo nitrificados, como los frecuentados por ganado. Planta del Mediterráneo occidental, distribuida por el sur y levante de la Península ibérica, en cotas bajas, hasta los 400 m de altitud. En la Región de Murcia es una planta común en el territorio semiárido de la franja litoral, que alcanza las sierras prelitorales y enclaves propicios de la Vega Media del Segura.

Observaciones

   Especie de floración especialmente prolongada, que se extiende desde las primeras lluvias otoñales (septiembre u octubre) hasta bien entrado el verano (julio); florece en abundancia en pleno invierno (diciembre y enero).

   Antiguamente, una preparación casera de esta planta se utilizaba como remedio rural para matar o expulsar las lombrices intestinales. También se ha empleado en la elaboración de licores.

   Una especie similar, de hojas alargadas, dentadas y revolutas, la alhucema rizada o cantueso dentado (Lavandula dentata), igualmente habitual en los matorrales de cotas bajas, frecuente en graveras de rambla o vaguada, es una destacada planta autóctona con valor ornamental.

   En matorrales abiertos sobre suelos silíceos se presenta puntualmente el cantueso (Lavandula stoechas), con espiga más gruesa, flores de color morado oscuro y penacho de brácteas superiores de azuladas a moradas.

   La esencia de lavanda se obtiene, principalmente, de razas híbridas de espliego (Lavandula latifolia), especie silvestre y común en los matorrales del interior regional, en particular por el Noroeste y el Altiplano. Los cultivos de éstas, denominadas lavandín, ocupan grandes extensiones en los municipios de Moratalla (Campo de San Juan) y Caravaca (El Moralejo, Los Royos, etc.); en julio, alcanzada la época más calurosa del año, los paisajes de estas zonas se tiñen de violeta hasta el horizonte.

José Antonio López Espinosa