Interior [Castillo de Calentín Mazarrón]
Interior

Dos grandes torreones que flanquean un muro

Al no haberse realizado hasta la fecha ninguna actuación arqueológica de consideración sobre la fortaleza, es complicado estructurar los elementos arquitectónicos que formaron el castillo de Calentín.

El edificio se construyó adaptándose a la cima del cerro, en una superficie no muy extensa. Como en otras fortificaciones medievales existentes en el Reino de Murcia, un potente zócalo de nivelación, levantado con mampostería ordinaria trabada con cal, sirvió de base para los muros de tapial de tierra o de calicanto (dependiendo del lugar). Actualmente, las estructuras más fácilmente apreciables en superficie son dos grandes torreones que flanquean un muro. En su interior también se distingue un aljibe de planta rectangular que un día estuvo cubierto por una bóveda de medio cañón, hoy caída. Alonso Navarro dió cuenta de la existencia de una puerta en recodo con su rampa de acceso, hoy difícilmente visible.

Un aspecto destacable son los paramentos exteriores, que, si bien fueron construidos mediante tapiales, todo parece indicar que en un momento de su historia se recubrieron de mampostería ordinaria trabada con cal o yeso, lo que puede indicar varios momentos constructivos o varias fases de ocupación.