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Otro de los periodos que ha aportado mayores novedades en el marco de las investigaciones desarrolladas en estos últimos años en nuestra región es el correspondiente a la Edad de Bronce, en el segundo milenio antes de nuestra Era.
Entre ellos destaca sobremanera el proyecto que viene desarrollando la Universidad Autónoma de Barcelona, en el poblado argárico clásico de La Bastida de Totana, que pretende no solamente el re-estudio de las intervenciones arqueológicas antiguas y la ampliación del área de estudio, sino también la puesta en valor del yacimiento con la creación de un Centro de Interpretación y Estudio “in situ”.
Las excavaciones en extensión en el poblado de Molinos de Papel (Caravaca) han proporcionado, amén de un gran número de estructuras, el más completo ajuar de objetos trabajados en marfil, de grandes dimensiones, de la prehistoria peninsular.
Los trabajos científicos en el solar de la antigua iglesia en la plaza de San Cayetano, de la localidad de Monteagudo (Murcia), han documentado una serie de cabañas de época argárica completas, con un rico ajuar tanto doméstico como funerario, que se integrarán musealizadas en el proyecto de un Centro de Acogida a los Visitantes en dicho cerro, de gran interés arqueológico.
En los Abrigos del Pozo (Calasparra), además de los niveles neolíticos, descritos en la sala anterior, se documentó un nivel de época argárica, que incluía un depósito de pequeños vasitos carenados votivos, que remiten a una reutilización del espacio con un carácter ritual, en ese momento.
Finalmente, debemos destacar el gran hallazgo del depósito funerario del yacimiento del Camino del Molino (Caravaca), una cueva-sima, donde se amontonaron cerca de 500 individuos entre los períodos calcolítico y argárico, en lo que supone el mayor enterramiento colectivo de la Península Ibérica conocido hasta el momento.