Talla realizada en madera policromada. Mide dos metros y diez centímetros, se trata pues de una talla de gran envergadura.

Se trata de la representación de Cristo en la cruz. Cristo ha entregado su vida en sacrificio por la Humanidad.

Esta colocado frontalmente, solo la cabeza rompe la acusada frontalidad. Se gira esta hacia la derecha, al mismo tiempo que se levanta hacia arriba. Se trata pues de un Cristo vivo, quizá en el momento de la aclamación del salmo: 'Señor, por qué me has abandonado'.

Las trazas de esta obra se corresponden a las líneas estéticas del barroco y, en concreto, de las del barroco murciano, que como es sabido tiene su máximo exponente en Salzillo. Si recordamos que González Moreno, el autor, pasó buena parte de sus primeros años profesionales restaurando y recuperando obras barrocas deterioradas durante la contienda civil, entenderemos está similitud entre esta obra y otras del período Barroco. De hecho sabemos que este templo albergaba un Cristo de la Agonía de Roque López, discípulo de Salzillo.

El cuerpo esta clavado al madero por tres clavos. Dos para las manos y uno para los pies. Las piernas se arquean hacia dentro, cruzándose a la altura de los tobillos.

Es un Cristo que todavía vive, aún no tiene la herida del costado que constata su muerte.

Observaciones

Anteriormente a este, había un Cristo de la agonía de Roque López, realizado en torno a 1800, pero desapareció.

Nombre: El Cristo de la Agonía.

Objeto: Escultura.

Autor: Juan González Moreno.

Fecha: Primera mitad del siglo XX.

Ubicación: Iglesia la Asunción de Cieza.