Se trata de una representación de Jesús camino del Calvario. Lleva sobre sí la cruz en la que ha de ser clavado. Está vestido con túnica en color morado aterciopelado. Ésta se decora con un ribete que bordea las mangas y la parte frontal.

     El rostro es sereno pero dramático, como corresponde al momento en que suceden los hechos. Los ojos son grandes, abiertos al infinito, la boca entreabierta dando la sensación de dolor y las barbas divididas en dos bandas de escultórico trazado.

    La forma del cráneo, estrecho y abultado en el hueso frontal, es característico de las obras de Bussy. La forma de las cejas también esta en armonía con las del maestro, aunque no de forma tan convergente como las que el realiza. Se ha apuntado que esta escultura probablemente sea una obra de taller, en la que intervino alguno de sus discípulos, de ahí las diferencias de factura.

     Por el contrario, las manos responden por completo a la forma de hacer de Bussy, ya que en ellas destaca el tratamiento de las venas sinuosas.

     Es un modelo que tiene bastante aceptación entre la población, de ahí la gran cantidad de figuras con las mismas características.

Observaciones:

     En las actas de la cofradía, recogidas en la iglesia parroquial de Nuestra Señora de los Remedios, consta que en una de las restauraciones que se hicieron de esta escultura, se halló una nota en la espalda de la imagen que decía: 'Jesús, apiádate de tu siervo Nicolás'.

Nombre: Nuestro Padre Jesús Nazareno.

Objeto: Escultura.

Autor: Nicolás de Bussy.

Fecha: Siglo XVII.

Ubicación: Iglesia Nuestra Señora de los Remedios.Albudeite.