Imagen de cabeza y manos, con cuerpo y devanaderas para vestir. Tamaño menor que el natural.

Se trata de la imagen de la Virgen, dolida por la muerte de su hijo. La espada que le atraviesa el corazón simboliza el dolor tan desgarrador que está experimentando ante la cruel muerte que han dado a Cristo.

Francisco Salzillo utiliza para los rostros femeninos un tipo casi invariable, así pues, gusta de facciones redondeadas, donde la barbilla adquiere un breve y gracioso abultamiento que deja iniciado un pliegue carnoso por de bajo de ella, a modo de sotabarba. Del mismo modo, los ojos no son tan grandes como los de su amigo Bussy ni los que emplea su padre Nicolás. Son ojos vivos, pero de ninguna manera desmesurados.

La Virgen está de frente, con los brazos abiertos en actitud de dolor. No obstante, a pesar de estar colocada de forma frontal, podemos observar un leve giro de la cabeza hacia la derecha. Esto ocurre prácticamente en todas las esculturas de Salzillo, donde las cabezas están colocadas sobre cuellos nunca estáticos, ligeramente movidos a derecha o izquierda.

Está ataviada con una túnica o vestido de color rojo con bordados en oro. Los motivos que decoran dicha túnica son florales y vegetales. Por encima de la túnica, un precioso manto de color azul, bordado con motivos florales en color oro, rosa y blanco.

Observaciones:

Francisco Salzillo fue el imaginero más apreciado en la Región de Murcia por clérigos y devotos, recibiendo una gran cantidad de encargos. Muchos de ellos han llegado hasta nuestros días permitiéndonos disfrutar de la belleza y calidad técnica de las obras de dicho autor.

Nombre:Dolorosa

Objeto: Escultura

Autor: Francisco Salzillo y Alcaraz 

Fecha: Siglo XVIII, 1782

Ubicación: Iglesia de santa María la Real de Aledo