Realizado en madera policromada.

     Se trata de la figura de San José que tiene entre sus brazos al Niño. Está representado como un hombre joven, con la mirada al infinito y la boca entreabierta. El Niño, simpático risueño, tiene los brazos abiertos como implorando al cielo. Ambos aparecen sobre una peana de nubes y angelotes.

     Esta obra es un claro exponente de la influencia de Bussy en Nicolás Salzillo. Ejemplo de ello es la frente abultada del San José, las arrugas del frontal, la estrechez de sienes, los ojos grandes y ahuevados y las venillas de las manos. No obstante, es todavía una obra de formas duras y esquemáticas.

Según lo que acabamos de comentar debe tratarse de una realización de los primeros años del artista en Murcia.

El modelado es muy tosco, la paleta de las carnaciones es bastante oscura. Sobresale la policromía de las vestiduras, y, más concretamente, la estofa que decora la túnica y el manto que le envuelve.

El tema de San José y el Niño es utilizado en varias ocasiones por Nicolás Salzillo.

Observaciones:

Nicolás Salzillo llega a Murcia desde Capua tras la disolución allí del taller de Aniello y Michelle Perrone, maestros napolitanos con los que se había formado.

Nombre: San José y el Niño

Objeto: Escultura

Autor: Atribuido a Nicolás Salzillo 

Fecha: Siglo XVIII. 1700-1710

Ubicación: Iglesia Parroquial de la Concepción Caravaca de la Cruz