Vista de la iglesia y del ayuntamiento
Vista de la iglesia y del ayuntamiento

    La iglesia de Torre Pacheco resistió el paso de los años pese a las importantes deficiencias que presentaba. Su estructura no sufrió grandes reformas hasta el año 1936 en que se eliminó el último cuerpo de la torre campanario para usarla como observatorio. La torre fue reconstruida a principios de la década de 1940.

    El 5 de octubre de 1952, en plenas Fiestas Patronales se produjo un cortocircuito que provocó el incendio de la imagen de la Virgen del Rosario, la patrona de la localidad. En días posteriores se abrió una suscripción entre los vecinos para recaudar fondos, con el fin de costear una nueva imagen que fue encargada al escultor José Sánchez Lozano. La imagen fue bendecida el 4 de octubre de 1953 en una misa de campaña que se celebró en la Plaza del Ayuntamiento.

Demolición del templo

    A mediados de la década de 1960 surgieron algunas voces que pidieron la construcción de una nueva iglesia parroquial. Los defensores de la reforma argumentaron que el templo no estaba adaptado a los nuevos tiempos, tanto por su mal estado de conservación, como el importante crecimiento de población que se había producido en los últimos años, que había derivado en que la iglesia no reuniera la capacidad suficiente como para acoger a los feligreses. La posibilidad de derribar la iglesia produjo división de opiniones entre el vecindario. Ante esta circunstancia el párroco, Ángel Martínez Alarcón, tomó la decisión de hacer una consulta popular para que los pachequeros se pronunciaran sobre la conveniencia de conservar el templo, o de derribarlo.

    En noviembre de 1968 se enviaron unas 1.500 cartas a los vecinos del pueblo para que manifestaran su opinión. Sólo se recibieron 154 contestaciones. El 97,4 % de los remitentes se mostró a favor de la edificación de un nuevo templo en el solar del actual, con fachada a la calle Mayor. En octubre de 1969 se celebró una reunión en el Cine Greg en la que se acordó pedir el asesoramiento al Obispado. El obispo Miguel Roca Cabanellas autorizó la demolición del templo, que comenzó a ejecutarse en junio de 1971. Las obras se prolongaron durante más tiempo del previsto. Se necesitaron varios días para destruir la torre, debido a que el espesor de sus muros era de casi un metro de ancho.

Aspecto exterior

    La iglesia estaba orientada hacia levante: es decir, la entrada hacia el este, y la cabecera del templo hacia el oeste. Tenía unos 30 metros de fachada. En la parte derecha existía una ventana pequeña que daba luz a una habitación, a modo de trastero, en la que se guardaban objetos tales como el monumento que se ponía en el Altar Mayor en Jueves Santo, el catafalco para el día de difuntos y ánimas, las alfombras…etc. A la izquierda de esta ventana, por encima del arco de entrada a la iglesia, estaba el escudo del Deán Pacheco.

    A la izquierda de la puerta de entrada se encontraba la lápida de mármol en la que se indica la fecha de la fundación de la parroquia. Muy cerca de ella se hallaba una ventana circular que daba a “la habitación de los rollos”, llamada así porque allí se vendían los populares rollos de San Antón. A finales del siglo XVIII en esta habitación se habían efectuado enterramientos, pues en esta época existía la costumbre de enterrar a los muertos en las iglesias, debido a que eran un lugar sagrado.