Inmaculada [Iglesia Arciprestal de Nuestra Señora del Carmen]
Inmaculada

Talla realizada en madera policromada y estofada. Tamaño menor que el natural.

Se trata de la representación de la Inmaculada.

Esta colocada de frente, sobre un pedestal con forma de nube. A los pies el dragón, representación del Enemigo.

Entorno a la nube plateada, hay dos pequeños ángeles y un querubín.

La Virgen esta en actitud de caminar, tal como es característico en las obras de Salzillo.

La cabeza se gira bruscamente hacia la derecha rompiendo la frontalidad. El cuerpo también realiza un giro de cintura.

El brazo izquierdo se desprende del cuerpo, dando lugar a una composición abierta. El otro, el derecho, se repliega sobre el pecho.

Está ataviada con una túnica de color blanco, ricamente decorada con motivos florales en tonos dorados, rojos y verdes. En la cintura se adhiere al cuerpo por un lazo dorado.

Es una figura dotada de gran movimiento. Todo en ella es un ir y venir. Los paños del vestido y del manto dan la sensación de estar azotados por el viento.

Sobre la túnica, un esplendido manto de color azul, que destaca por el movimiento de los pliegues.

La expresividad del rostro, se encuentra matizada por unas cánones de belleza idealizada, propios de una estética en cierto modo academicista.

Observaciones

Francisco Salzillo y Alcaraz, nace en Murcia en 1707. Era hijo del escultor napolitano Nicolás Salzillo.

Supo combinar el arte de su padre, con el de Bussy y Dupar, creando un estilo que perdura hasta nuestros días.

Nombre: Inmaculada.

Objeto: Escultura.

Autor: Francisco Salzillo.

Fecha: Siglo XVIII.

Ubicación: Iglesia Nuestra Señora del Carmen.