Materia: Plata

Año: 206 H./205 H.

Procedencia: Museo Arqueológico de Murcia.

Descripción: Estas monedas proceden de las excavaciones realizadas en el Cerro de la Almagra (Baños de Mula, Murcia) entre 1997 y 2001. Se trata de siete piezas, todas ellas dírhams de plata de cronología omeya, correspondientes al emirato de al-Ḥakam I, y que conforman un conjunto muy homogéneo desde el punto de vista cronológico: seis de las siete piezas corresponden al año 206 H. (6 de junio de 821 - 26 de mayo de 822) y la séptima, al 205 H. (17 de junio de 820 - 5 junio de 821).

Las piezas se localizaron relativamente cerca unas de otras, en una superficie aproximada de 150 m2, en la zona del cementerio ad sanctos de cronología visigoda, cinco de ellas en el edificio identificado como iglesia o basílica de la misma época, pero dentro de una estratigrafía con materiales tardíos.

Son totalmente epigráficas. Las leyendas son las mismas para todas ellas, correspondiendo al modelo emiral del momento, con la única variación del año de acuñación. En el centro del anverso, en tres líneas, aparece la kalima o profesión de fe unitaria, cuyo significado más o menos aproximado es: «No hay otra deidad que / Dios, Él únicamente, / sin asociado. La inscripción de la orla indica la ceca y el año de acuñación: «En el nombre de Dios se acuñó este dírham en al-Andalus en el año cinco y doscientos1». En el reverso, en el centro, va la sura 112 del Corán: «Dios es único, Dios es / eterno e indiviso.No es engendrante / ni engendradoni existe / semejante a Él». En la orla llevan escrita la sura 61: «Muḥammad es el enviado de Dios, le envió con la dirección y religión verdadera para que resplandezca sobre toda otra, aunque repugne a los asociadores».

Todas las piezas se corresponden con el estilo definido como «A» por Castro Priego, el primer margen de la leyenda marginal de la orla es rectilíneo, adoptando el resto forma poligonal; suelen tener adornos centrales en la orla y las centenas aparecen escritas.

La metrología de las piezas, entre 2,1 y 2,8 g, presenta índices inferiores a la media emiral, ya que el peso teórico de un dírham sin alteraciones se situaría entre 2,65 y 2,70 g. Quizás estos pesos inferiores puedan responder a las manipulaciones sufridas ya que sus orlas aparecen recortadas. Las piezas catalogadas con los nos. 3-7 aparecieron en un conjunto cerrado, posiblemente por estar guardadas en un envoltorio de material perecedero del que no se conservan restos.

El hallazgo de estas monedas, dentro de los niveles de abandono y destrucción, nos permiten situar los últimos momentos de Mula, ciudad de la Cora de Tudmîr, en el contexto de inestabilidad en el que se halla inmerso todo el Sureste peninsular y que provocó la intervención de Abd al-Raḥman II. Ésta dio lugar a una serie de acontecimientos decisivos para la definitiva configuración administrativa de esta zona, como fueron la fundación de Murcia y la destrucción de Iyyuh, entre otros y que desembocaron en la estabilización y el control efectivo del territorio por parte de Córdoba. De forma clara las piezas marcan una cronología concreta para el nivel de abandono sistemático en las zonas excavadas.

Nuestra propuesta, por tanto, es que la destrucción y abandono de la ciudad se produjo en un momento posterior a la emisión de las monedas y antes del 829, año en el que la situación volvió a ser relativamente estable.

Bibliografía: Carmona, 1989, pp. 85- 147; Castro, 1999; Domenech y Gutiérrez, 2006, pp. 337-334; Frochoso, 2009; González y Gonzále, 1996; González, 1994, pp. 295- 305; González y Fernández, 2007, pp. 165- 179; González, Fernández y Crespo, 1999, pp. 626- 630; González y Fernández, 2010, pp. 81- 119; Gutiérrez, 1998, pp. 145- 148; Pocklington, 1987, pp. 55- 61.
R.G.F. y F.F.M.