El apartado de Recursos Didácticos de la etapa medieval se centra en dos temas: la cerámica y el agua. La cerámica es el objeto más frecuente en una excavación arqueológica; sirve para datar una estructura, un relleno, para analizar las relaciones comerciales de un poblado, sus hábitos de consumo, su desarrollo tecnológico e incluso sus costumbres, folclore y tradiciones religiosas. La cerámica en el mundo islámico andalusí y peninsular se caracteriza por una gran variedad tipológica, decorativa y formal. Las técnicas de decoración utilizadas son muy variadas (cuerda seca total o parcial, esgrafiado, decoración a la almagra o el manganeso, reflejo metálico, estampillado), poseen un amplio surtido de recursos decorativos y ornamentales y un gran repertorio tipológico (vajilla de mesa, de almacenamiento, de cocina, de fuego).

  La relación del mundo islámico con el agua es bien conocida. Sus magníficas estructuras hidráulicas, en parte herencia clásica, en parte innovación islámica, sirvieron para desarrollar regadíos alabados por fuentes documentales contemporáneas; en este apartado se abordará  la trascendencia del baño dentro del mundo islámico, la gran proliferación de baños, tantos públicos como privados, y cómo la función inicial de las abluciones rituales dará paso al baño con fines higiénicos o terapéuticos, siendo un exponente del refinamiento de la sociedad islámica instalada en las ciudades.