Este documental reconstruye en formato 3D la Historia de La Bastida de Totana, yacimiento prehistórico descubierto en el siglo XIX por un campesino y dado a conocer por el ingeniero Rogelio Inchaurrandieta. El poblado prehistórico se localiza en el Cerro de la Bastida, a unos cinco kilómetros de Totana, y llegó a tener entre 600 y 800 habitantes. El yacimiento pertenece a la cultura de El Argar, desarrollada en el sureste peninsular en el II milenio antes de Cristo.

  El asentamiento del poblado estaba en altitud; poseía una muralla en todo el perímetro y las calles eran estrechas para facilitar su defensa ante posibles ataques externos. La Bastida se situaba en un lugar estratégico cercano a fuentes de agua, tierras de cultivo, pastos para el ganado, tierras arcillosas para la alfarería y bosques para la obtención de la madera como combustible.

  La sociedad de La Bastida se caracterizaba por su jerarquización en clases sociales: alta, los jefes y guerreros; media, los hombres libres; baja, los siervos o esclavos. Las viviendas se construían de adobe, con techumbre plana de esparto y barro y con una o más estancias. Los enterramientos se realizaban bajo la vivienda y podían ser individuales, dobles o triples. Los tipos de enterramientos eran dos: en cista o urna y en vasijas. Los difuntos iban acompañados, normalmente, de ajuar.

   Las principales actividades económicas eran la agricultura de cereales, la ganadería ovina, caprina y porcina; la alfarería con la producción de cerámica de barro o yeso cocida en hornos pequeños para la producción de utensilios de diferentes colores como el rojo, el marrón y el negro, la práctica de la caza de animales como el ciervo, el conejo o el jabalí y la extracción de minerales para la fabricación de útiles mediante su fundición en moldes preparados. En definitiva, La Bastida de Totana constituye el yacimiento argárico más importante de la Región de Murcia y uno de los legados más importantes de esta cultura en España.