Los alistamientos militares a comienzos del siglo XX
Uno de los actos que rompía la monotonía diaria en Ceutí, era el alistamiento de los mozos de reemplazo, acontecimiento que tenía lugar en la Casa Consistorial. Una vez conocidos los nombres de aquellos que entraban en las listas de reclutamiento, fijado y hecho público el día del sorteo con la debida antelación, se reunían en la Casa Consistorial los miembros de la Corporación Municipal, el Juez Municipal y el Párroco, (ambos como invitados), el Médico Titular, el Ayudante Tallador y el Secretario del Ayuntamiento.
Las papeletas con los nombres de los mozos se introducían en bolsas iguales y éstas en dos globos de los cuales uno contenía los nombres y el otro los números, leyéndose los primeros separadamente al tiempo de su introducción por el Sr. Presidente del Ayuntamiento y los segundos por el regidor Síndico, se removían lo suficientemente los globos, verificando después la extracción dos niños menores de diez años, que lo hacían entregando la bola de los nombres al Síndico y el otro niño acto seguido, la de los números al Sr. Presidente; seguidamente sacaba el Regidor Síndico la papeleta leyendo el nombre en voz alta; y el Presidente el número leyéndolo también del mismo modo, poniendo de manifiesto ambos señores a continuación las papeletas a los demás concejales y a cuantos interesados querían verlas, conservándose estas unidas hasta el final del acto.
Un concejal llevaba a su cargo la lista de extracción que tenía previamente preparada, consignando los nombres al frente de los números de orden, mientras el Secretario anotaba los nombres y números según iban saliendo, (éstos en letra y en cifra)
Terminado el acto del sorteo e inserta la lista de extracción sin mediar protesta ni reclamación alguna, se daba lectura del acta, manifestando que se expondrían al público copias de la lista y extracción, por el que quisiera reclamar contra el acto que acababa de celebrarse, debiendo verificarlo dentro del plazo de tres días, puesto que el primer domingo del mes siguiente era el designado por la ley para proceder al acto por el cual se procedía a la revisión de exacciones y excepciones según estaba prevenido a cuyo fin serían luego citados por edictos y papeletas duplicadas a los interesados.
El médico, el juez y el cura
El 12 de enero de 1902, además de los miembros del Ayuntamiento, el Médico Titular D. Pedro Fernández Vera, y el Ayudante Tallador Francisco Martí Baño, asisten al acto el Juez Municipal D. Ramón Vigueras Jara y el Sr. Cura Párroco D. Pedro Gil García, como invitados.
La sesión tiene lugar a las nueve de la mañana, una vez constituida la Corporación en sesión pública, se mandó anunciar a voz de pregonero, convocando a los interesados que quisieran presenciar la formación del alistamiento de los mozos o quintos, correspondientes al llamamiento del año actual para el reclutamiento y reemplazo del Ejército.
Presentes varios de éstos, dispone el alcalde Alfonso Faura Jara, que se diera principio a tan importante operación con la lectura de la ley y disposiciones vigentes, lo cual lo verifica el Secretario en alta voz, y estando sobre la mesa el padrón de habitantes y los demás datos que se han creído convenientes, se dio principio a la formación del indicado alistamiento.
Este año de 1902 son 22 los jóvenes nacidos en 1882, que son nombrados para incorporarse al Ejército.
El 30 de marzo se nombra comisionado de quintas al Secretario de la Corporación José Iniesta Pérez, para que en nombre del Ayuntamiento, comparezca ante la Comisión Mixta de Reclutamiento de la provincia, los días 5 y 29 de abril, al acto de la revisión del reemplazo actual y la de los años 1899 y 1901. Se le gratifica por este servicio con 5 pesetas cada día de estancia en la capital, más el abono de la cantidad por el concepto de socorros a los quintos y demás gastos que le ocasione dicha Comisión.
En el mes de julio, se nombra de nuevo al Secretario de la Corporación que en estos momentos es Tomás Aledo Navarro, para que en representación del Ayuntamiento, haga entrega en la Caja de la zona de Lorca, el día 1 de agosto de los mozos de esta Villa, gratificándolo por el servicio con 25 pesetas.
En años sucesivos el procedimiento sigue siendo el mismo, aunque a partir de 1906 la entrega de los mozos se hace en la Caja de Reclutas de Cieza, y el Ayudante Tallador será Antonio Faura Mira, sargento licenciado del Ejército, al que se le abonan por sus servicios la cantidad de 10 pesetas.
José Antonio Marín Mateos.
