Ródenas Rosa
Ródenas Rosa

La  primera referencia hallada sobre el tema que nos ocupa se remonta a 1868 sin que se pueda especificar si el origen del alumbrado público de petróleo fue anterior a esa fecha o no.

En 1898 este municipio de 500 habitantes  gastaba por en iluminación  la cantidad de 500 pesetas anuales que subieron a 750 pesetas al año siguiente. a siguiente reseña data del mes de marzo de 1901 cuando se le abonan 20 pesetas a Francisco Vicente Fernández por el arreglo de cristales de farolas y a José María Fernández Ros (adjudicatario del combustible hasta 1905 y encargado de los repartimientos de consumo) 180 pesetas por un trimestre de petróleo. 

En 1906 es nombrado recaudador un hermano del alcalde, José,  y subastero de petróleo otro, Juan Antonio López; sólo permanece en su puesto el encargado de las reparaciones, Francisco Vicente Fernández.

Algunos años después que otros pueblos vecinos, concretamente en 1908, Juan Martínez, director gerente de la fábrica de energía eléctrica de Lorquí, La Providencia, presenta un proyecto para la instalación  de 30 lámparas incandescentes de 10 bujías. Sin embargo, no llega a producirse el cambio de alumbrado; algo comprensible si se tiene en cuenta que Juan Antonio López, hermano del Alcalde como ya vimos, continúa siendo -sin necesidad de sacar la adjudicación a subasta como se hace en toda la Región-  el proveedor de petróleo  del viejo sistema de iluminación. 

Para 1909 Juan Antonio López deja el negocio del petróleo para pasar a ser Primer Teniente de Alcalde, sucediéndole en el suministro Antonio Belchí Balsalobre, escribiente temporero del Ayuntamiento desde comienzos de siglo y, años después, alcalde del municipio (1924-27). El primer semestre se le abonó todavía a Juan Antonio (500 pesetas) pero el segundo semestre ya lo cobró Antonio Belchí (200 pesetas).

Entre tanto, como el recaudador  había estado sin presentar  la recaudación  de los  años anteriores. Al año siguiente, en 1910, se otorga la contrata del suministro de petróleo a Francisco Vicente Fernández por 690 pesetas anuales. Pero entre 1911 y 1914 volvió a las manos de Antonio  Belchí al precio de 780 pesetas anuales encargándose de las reparaciones José Vera García.

La luz en Los Pulpites

En 1920 una pedanía de Las Torres de Cotillas empezaba a disfrutar de la luz eléctrica gracias a la pequeña central creada por el ingeniero Bartolomé Ródenas Rosa, instalador de motores para la obtención de agua.  De ellos instaló un total de 16 en este municipio y en el Javalí.  Fué, además, un rico terrateniente (Rincón de Lax, Los Romeros de abajo, Los Pulpites...).

ara el verano de 1921 ya se contemplaba el pago de electricidad del casco urbano a la empresa Molinos del Segura, de Archena. En este caso el cobrador del empresario Jerónimo Ruiz Hidalgo, para Las Torres, fue Juan Antonio Arnáldos Hernández. El gasto mensual era de 100 pesetas en 1921 y 1922, subiendo a 120 en 1923, algo más en verano, y a 125 pesetas mensuales para  comienzos de 1924, año en el que llegará a alcanzar el precio de 166,6 pesetas. 

Este lento proceso de encarecimiento denota un también lento aumento de bombillas que, por cierto, se colocaban en las esquinas de las calles. En 1923 el término municipal quedó atravesado por dos líneas instaladas por Hidroeléctrica Española para la conducción de energía desde Abarán a Murcia y Cartagena. Por fin, en enero de 1928 se instalaron 3 luces en La Condomina y otras tantas en el barrio de Cutillas y a mediados de la década de los años treinta se revisaba y ampliaba la iluminación en determinados puntos del casco urbano.