En estos diez años se incrementa notablemente su producción escultórica entre otras razones por poseer una técnica importante en el ejercicio de su arte, y por la difusión de sus obras a lo largo y ancho de la región y provincias limítrofes con la consiguiente aprobación de sus contemporáneos, que aumentan sus encargos.
1748
Nuestra Señora del Refugio, en la Iglesia de Santiago de Lorca. El grupo estaba compuesto por la Virgen, Santiago, un ángel y cuatro ánimas. Destruída.
Jesús Nazareno, en la Parroquia de Huercal-Overa en Almería.
Esta imagen de vestir, es impresionante y mueve a la devoción.Quizás expreso en ella su devoción y admiración pora Nuestro Padre Jesús Nazareno de la Cofradía de Jesús, única imagen que en la procesión de Viernes Santo en Murcia no es obra de Salzillo sino de un autor anónimo (atribuído antiguamente a Juan de Rigusteza).
1749
San Eloy, en la Iglesia de San Bartolomé (Murcia)
Es imagen de vestir, encargo de la cofradía de Plateros. Destaca en ella el Crucifijo que porta, obra también del escultor y de magnífica talla y realizado como el famoso Cristo del facistol de la Catedral de Santa María (Murcia).
1750
Jesús Nazareno, en la Iglesia de Fortuna. Imagen de vestir, similar a la que hubo en Alcantarilla.
San Isidro Labrador, en la Iglesia de San Juan Bautista (Murcia).
1752
Oración en el Huerto, en la Iglesia de Jesús (Museo Salzillo, Murcia)
Es uno de los famosos pasos de la procesión de Viernes Santo de Murcia. Está compuesto por dos grupos, de una parte el Ángel que sostiene a Cristo (este último imagen de vestir) y de otra tres apóstoles que están durmiendo. El Ángel fue hábilmente representado por Salzillo con un bello rostro que no permite determinación sexual por sus rasgos fisonómicos y con un impresionante plumaje.
El grupo que forman los Apóstoles es un ingenioso estudio de actitudes: San Juan duerme profundamente, acomodada su cabeza sobre un brazo extendido, Santiago reposa en posición descuidada, y el cuerpo da auténtica sensación de peso; San Pedro se representa alerta, aunque duerme da un expresivo matiz de duermevela y sujeta la espada con la mano.
La Caída, en la Iglesia de Jesús (Museo Salzillo, Murcia)
Es otro de los grandes pasos de Viernes Santo. El grupo escultórico está compuesto por Jesús, Simón de Cirene o Cireneo, dos sayones y un soldado romano. Todas son tallas de madera policromada y estofada, aunque la imagen de Cristo es de vestir. El rostro de Cristo es una de las mejores obras de Salzillo, con una mirada que exterioriza todo su dolor y angustia.
En el soldado romano se puede apreciar uno de los anacronismos típicos de Salzillo, ya que el soldado viste una armadura de finales del siglo XVII, lleva una lanza en la mano derecha y con la izquierda agarra el sable que mantiene envainado.
1755
Cristo de la Esperanza, en la Iglesia de San Pedro Apóstol (Murcia)
Titular de la Pontificia, Real y Venerable Cofradía del Santísimo Cristo de la Esperanza.
Verónica, en la Iglesia de Jesús (Museo Salzillo, Murcia)
También es un paso de Viernes Santo. De expresión melancólica y gentil, representa en palabras de Sánchez Moreno "una regresión salzillesca lo italianizante", una forma que parecía abandonada por el escultor.
San Jerónimo penitente, en la Catedral de Santa María (Murcia), antes en el Monasterio de San Jerónimo (La Ñora, Murcia)
Es considerada por la crítica como una de las mejores obras de la imaginería española. La obra está firmada por él, lo que es bastante inusual en su obra. Representa al Santo arrodillado con un crucifijo en la mano izquierda. De la imagen avejentada del Santo fluyen humanidad y santidad.
San Isidoro, San Leandro, San Fulgencio y Santa Florentina, en la Iglesia Catedral de Santa María de Arriba, (Cartagena).
Se trata de imágenes al más puro estilo académico, perfectas, de correctas líneas, se consideran inspiradas en el imafronte catedralicio, diseñado por Jaime Bort.
San Juan, en la Iglesia de Jesús (Museo Salzillo, Murcia)
Es el más valioso exponente de la concepción de movimiento, la colocación adelantando una pierna y recogiendo la túnica para no perder el paso, señalando con su brazo izquierdo extendido, el lugar por donde marcha Jesús. Esta disposición junto con los pliegues, que forma la túnica, da la sensación de comenzar a caminar.
Dolorosa, en la Iglesia de Jesús (Museo Salzillo, Murcia)
Es imagen de vestir de 165 cm., va acompañada de 4 ángeles, también de Salzillo. Posiblemente sea la mejor expresión de amor materno de toda la producción de Salzillo, su cabeza y sus manos son joyas de modelado y delicadeza.
Cristo de la Columna, en el Monasterio de Santa Ana, de Jumilla
Es la mejor representación que hizo Salzillo de Cristo con el torso desnudo.
Cristo de la Agonía, en la Catedral de Santa María (Murcia).
Está colocado sobre el facistol y es conocido como El Crucifijo del Coro. Es una talla limpia en ejecución, atrevida de movimiento, anatómicamente irreprochable y bien policromada.
Estigmatización de San Francisco, en el monasterio de las Hermanas Clarisas. Orihuela (Alicante). De datación indeterminada (entre 1757-1763).
Santa Florentina, en el Ayuntamiento de Cartagena.
