Rosa Torres

Inicia sus primeros pasos en las Artes Plásticas en la High Kensington school de Londres.

Realiza estudios de Modelado y Talla en Madrid y se diploma en Cerámica.

Sus murales de gran formato, modelados en gres y decorados con esmaltes de alta temperatura, decoran fachadas de centros públicos y casas particulares.

Desde 1993 se dedica al diseño de colecciones de pañuelos, abanicos, corbatas y kimonos que pinta sobre seda y vende en tiendas de museos y galerías de arte.

Entre las colecciones de pañuelos con motivos del patrimonio cultural tenemos la serie ¿Les Iberes¿ realizado para el Museo del ¿Grand Palais¿de Paris.

En el 2.001 recibe el Premio Mercurio a la Artesanía, otorgado por la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Murcia.

En el 2.005 ha participado en el proyecto de la incorporación del Diseño al Sector Artesano de la Fundación Española para la Artesanía.

Desde Pekín  y Nankín pasando por Karashar o Yarkand, por las vertientes del Karakorum hacia Samarcanda y desde allí hasta Antioquia o Tiro. Así llegó la seda desde el oriente lejano hasta este nuestro oriente y fue Murcia importante en el terreno de ese tejido y su decoración pues, mucho mçás tarde, los árabes crearían fábricas que les eran bien cercanas a nuestros abuelos por estas tierras.

Y quizás la seda soñaba con el paso de los siglos en ser teñida y pintada por unas manos de mujer que fuese capaz de elevar su decoración a la categoría de obra de arte. Y quizás también ese momento haya llegado ya con el trabajo de Rosa Torres, cuya sensibilidad artística pudiera haber obrado el milagro, el paso de la artesanía a la creación, a base de echarle emoción a la pintura de un sencillo pañuelo de seda.

El que esas delicadas obras partan a veces de cuadros de los pintores que la rodeamos puede ser una razón más para demostrar que la belleza de estos pañuelos tiene planteamientos que no son lo usual en este tipo de asuntos.

La marca de Rosa torres es la personalidad creativa llena de color estampado que, a menudo, hace de sus pañuelos un cuadro más. Y un cuadro realmente bello.

Enrique Nieto