Free cookie consent management tool by TermsFeed REAL ALCÁZAR SANTUARIO DE LA SANTÍSIMA Y VERA CRUZ - Origen Histórico - Región de Murcia Digital
ARTE Y CULTURA

REAL ALCÁZAR SANTUARIO DE LA SANTÍSIMA Y VERA CRUZ

Origen Histórico

Santuario de la Vera Cruz
Fachada del Santuario de Caravaca
Región de Murcia Digital

Origen histórico del Real Alcázar-Santuario de la Vera Cruz

Sus orígenes, islámicos, los podemos situar en el siglo X, pero contamos con escasas referencias al respecto. La entrega de Caravaca a los templarios tuvo como motivo la rendición del Castillo por su señor, un jeque muslime del rey de Murcia Aben-Hudiel, al infante Don Alfonso, Alfonso X El Sabio, quien en 1243 lo puso bajo la guardia del aragonés Don Berenguer de Entenza, pasando en 1244 a poder de la Orden Templaria en la persona de Don Martín Martínez.

Entre los años 1244 y 1286 el comendador templario Gómez Suárez de Figueroa –a él se le debe la construcción de las dos atalayas, Jorquera y Represa- tuvo a su cargo la defensa de Caravaca por orden del rey Fernando III el Santo.

El templo actual fue construido en el lugar donde se encontraba el alcázar en el que ocurrió el Milagro, la aparición de la Santísima y Vera Cruz al rey moro de Caravaca Ceyt Abuceyt, y fue Felipe III en 1614 quien donó 7.000 ducados, según consta en el archivo municipal, dinero confiscado a los moriscos tras su expulsión.

El 16 de julio de 1617 comenzaron las obras que no se terminaron por completo hasta el año 1703, año en el que comenzó a levantarse la fachada barroca, impronta destacable del Santuario.

El 2 de abril de 1677 se traslada la Reliquia desde Santa María de los Ángeles al nuevo templo, todavía por finalizar. El proyecto fue realizado por el arquitecto real, el carmelita fray Alberto de la Madre de Dios.

El castillo se utilizó como fortaleza contra los franceses en la Guerra de Sucesión (1700-1713), durante esta se instalaron varios cañones en dirección al valle de Argos.