Este amplísimo y grandioso templo fue construido, entre los años 60 y 70, sobre el solar de la antigua Iglesia Parroquial de San Pedro, una bellísima obra arquitectónica derribada en el año 1961 para construir la actual.

El actual templo es un edificio moderno, con diversas obras del escultor local, Anastasio Martínez; entre ellas la más destacada es el retablo expresionista del Altar Mayor, que preside el grandísimo Crucificado de 7 metros; pero encontramos, también, otros motivos interesantes del mismo autor, como la Última Cena, el Sagrario de Bronce y la Capilla del Bautismo de la antigua iglesia del siglo XVI.  Realizó también entre otras capillas la de la Patrona y la de San Pedro Apóstol.

Son importantes, además, las muestras artísticas del arte contemporáneo como las vidrieras policromadas de estilo contemporáneo del excelente pintor alcantarillero Mariano Ballester. Destacan en el templo las pinturas de Muñoz Barberán en la capilla de Ntra. Sra. del Rosario, así como la escultura, obra cumbre, del escultor contemporáneo murciano José Planes, del Cristo Yacente en su capilla, o la Capilla de la Aurora, presidida por Ntra. Sra. de La Aurora - réplica de la destruida en 1936 de Francisco Salzillo -. Esta elegante y amplia capilla se salvó de la destrucción del anterior templo en 1961, ya que hizo las veces de almacén de materiales.