Fernando Díaz de Mendoza y María Guerrero junto a Benito Pérez Galdós
Fernando Díaz de Mendoza y María Guerrero junto a Benito Pérez Galdós

    El 11 de abril de 1897 la Compañía Guerrero-Díaz de Mendoza terminó la temporada en el Teatro Español. Cuatro días después los actores se embarcaron desde Barcelona para iniciar su primera gira por América. La compañía tenían previsto interpretar 90 funciones en distintos teatros de Buenos Aires y Montevideo. El contrato firmado con una empresa americana estipulaba que debían recibir como honorarios el 65% de los ingresos, siempre que la recuadación ascendiera a más de 2.000 pesetas diarias.

    Los periódicos argentinos presentaron a la compañía española como ''de primer orden''. Sin embargo, el público local tenía fama de ser muy exigente y varias compañías extranjeras habían fracasado en años anteriores.

Gran acogida del público argentino

    El escenario más importante de la gira fue el Teatro Odeón de Buenos Aires, en el que interpretaron 16 funciones, siendo las más destacadas ''El desdén es el desdén'', ''El vergonzoso en palacio'' y ''La niña boba'' del teatro antiguo y ''Mancha que limpia'', ''Lo positivo'' y ''Los Dolores'' del teatro de la época. Los espectadores quedaron impresionados con las representaciones. Las actuaciones fueron acogidas con verdadero entusiasmo.

    Los periódicos argentinos dedicaron calurosos elogios a los actores. El periódico español ''La ilustración artística'' interpretaba aquellos elogios como ''uno de los éxitos teatrales más grandes que ha presenciado la capital de la República Argentina''.

    La Compañía Guerrero-Díaz de Mendoza también triunfó en Montevideo. La primera gira americana fue un éxito de crítica y de recaudación, lo que abrió el camino para futuras giras en las que tuvieron la oportunidad de actuar en países como Perú, Colombia, Bolivia o Cuba.

Gira por Europa

    En el año 1902 Díaz de Mendoza vivió un triste episodio en Cuba. Su estancia en aquel país coincidió con la muerte de otro actor importante de la época, Antonio Vico, quien falleció en la ciudad de Nuevitas. Díaz de Mendoza se hizo cargo del cadáver para trasladarlo a España, costeando todos los gastos, pero debido a las dificultades de la época no pudo conseguirlo en primera instancia. Antonio Vico tuvo que ser enterrado en Cuba, aunque en 1907, gracias a la insistencia de Díaz de Mendoza, se logró trasladar el cuerpo al cementerio de San Justo de Madrid.

    El éxito de sus actuaciones animó a la compañía a emprender una gira de un mes por varios países de Europa. La primera actuación tuvo lugar el 4 de octubre de 1900 en el Teatro de la Renaissance de París con el estreno de ''La niña boba''. Más tarde actuaron Italia y Bélgica donde ofrecieron varias funciones que fueron muy bien acogidas por la crítica. Sin embargo, los compromisos adquiridos en España y América del Sur impidieron que se repitiera otra gira similar por Europa, aunque la compañía actuó en varias ocasiones en Portugal.