El Mondongo viudo se elabora en las cocinas de El Llano de Molina de Segura de manera muy tradicional. Lamentablemente, esta forma de cocinar se ha ido perdiendo con el tiempo, debido a lo dilatado del proceso de preparación.

Este guiso combina productos de la tierra, como los garbanzos y el arroz, con los callos, obteniendo un plato muy nutritivo y económico.

En la época romana ya se degustaban platos con productos de casquería del cerdo como los callos, que constituían verdaderos manjares para los habitantes de la zona.

Sería en el siglo XIII cuando los mercados de ganaderos comenzaron a comercializar toda esta materia prima.

Desde el punto de vista gastronómico, los platos que se cocinan con callos pueden llevar morros y patas de cerdo.