Etapa 1
Martes 4 de marzo de 2008. 197,3 kilómetros.
El australiano Graeme Brown (Rabobank) se impone a Koldo Fernández (Euskaltel-Euskadi) al sprint en la primera etapa de la Vuelta a Murcia 2008. La destacada actuación española la completa Aitor Pérez (Extremadura-Ciclismo Solidario).
Antonio J. Salmerón
El desenlace al sprint parecía un acierto fácil, teniendo en cuenta que el trazado final era propicio para que los equipos de los velocistas desempeñaran a la perfección su labor de abortar la fuga y de controlar posibles escarceos posteriores. Porque fue, hubo; también estaba cantado, y cómo no podía ser de otra manera con la presencia de López Gil, el 'malagueta', que junto a Alexander Serov (Tinkoff) se dieron un buen tute de kilómetros, ya que se escaparon muy pronto, y fueron absorbidos por el pelotón ya en las proximidades de Lorca. Y tampoco faltó el molesto Dios Eolo, que está mal acostumbrándose a acompañar a la serpiente multicolor de la Vuelta a la Región de Murcia.
El protocolario corte de cinta a las puertas del complejo hotelero Thalasia estuvo presidido por el consejero de Cultura y Deporte, Pedro Alberto Cruz, y por el alcalde de San Pedro del Pinatar, José María García Ruiz, que en compañía de la Organización dio la salida oficial de la ronda ciclista internacional murciana.
En la salida se concitaba el público en torno a las anunciadas figuras del pedal, encabezadas por el vigente ganador del Tour de Francia, el madrileño del Astana Alberto Contador, que ejerce como jefe de filas de la escuadra kazaka. El ídolo local Alejandro Valverde (Caisse d'Epargne) fue abordado por numeroso público y aficionados, entre los que se encontraban los alumnos del Colegio Público Los Pinos, de la localidad Pinatarense. También es de destacar el concurso de Carlos Sastre, cuarto en el pasado Tour de Francia y segundo en la Vuelta a España, el ruso de la Rabobank último vencedor de la gran ronda española, Denis Menchov, el vasco Samuel Sánchez (Euskaltel-Euskadi) e incluso el transalpino Stefano Garzelli (Acqua Sapone), sin desmerecer al equipo regional, el Contentpolis-Murcia de Ginés García y Manuel López, con Manuel Vázquez, Julián Sánchez Pimienta y Adrián Palomares en la punta de ataque.
Volviendo a la fuga de la jornada, que iniciaron muy pronto López Gil (Andalucía-Cajasur) y Alexander Serov (Tinkoff), acabó apenas a tres kilómetros de meta, después de haber cubierto juntos y en perfecta sintonía más de 150 kilómetros. El dúo de cabeza llegó a gozar de una ventaja próxima al cuarto de hora, y todo ello después de que se registrara un adelanto horario a la conclusión de los dos primeros tercios del recorrido de 197 kilómetros, si bien luego se tornó en un ligero retraso. Pero, como luego lamentó el propio López Gil, "cambio el sentido de la marcha ya cerca de meta, cuando teníamos al pelotón organizado y muy cerca nuestro, y eso acabó por echarnos abajo la fuga y las esperanzas, unido al fuerte viento".
Una vez queda claro que el desenlace será al sprint, las quinielas las copan el australiano de Rabobank, Graeme Brown, y el argentino del CSC, Juan José Haedo, mientras que en un segundo plano quedaban emplazados Koldo Fernández (Euskaltel-Euskadi) y Fran Ventoso (Andalucia-Cajasur), tal que así, una vez todos juntos, el pistard australiano le ganó la partida al argentino y se erigió primer líder de la Vuelta a la Región de Murcia, merced a su victoria incontestable en la meta de Lorca, después de cinco horas y once segundos; el mismo tiempo que el esperado Koldo Fernández (Euskaltel Euskadi) y que Aitor Pérez (Extremadura), que a su vez daban tiempo al pelotón principal.
Brown decía al bajar del podio que, "me siento muy en forma, de modo que no descarto repetir éxito en la meta de la tercera etapa en San Pedro del Pinatar".
Al día siguiente se disputó la segunda etapa que unió las localidades de Calasparra y Totana, con 152,5 kilómetros de viaje. Fue considerada la jornada reina de la edición con los altos de Ricote (3a), Pliego (3a), Espuña (1a) y Collado Bermejo (1a).