Las olas son el resultado visible de la transferencia de energía del viento al mar. Cuando el viento actúa sobre la superficie marina cede parte de su energía y genera el oleaje, cuya intensidad y altura dependerá de la fuerza y tiempo de actuación del viento, así como de la distancia a lo largo de la cual ha soplado el mismo (fetch).

     Al acercarse a la costa las olas sufren diversas deformaciones, dependiendo de la geomorfología de dicha costa. Por un lado están las deformaciones de dirección (reflexión, refracción y defracción) y por otro estarían las deformaciones del movimiento rotatorio de las moléculas de agua, que dan lugar a la ruptura de la ola. Este proceso, el oleaje, descargará su energía sobre el litoral, modificándolo y dándole forma, teniendo diferentes efectos según se trate de costas bajas (playas) o de acantilados. En una playa la energía se emplea principalmente en transporte del material desmenuzado de la misma (figura 1), en cambio, en un acantilado lo será en erosión y desmenuzamiento del mismo (figura 2).

Cómo afecta a los organismos marinos

     En la franja litoral sobre la que actúa el oleaje, las condiciones de vida son bastante duras, sobreviviendo sólo los organismos suficientemente robustos y con sistemas de fijación resistentes al embate de las olas (figura 3).

Valores en nuestras costas

     La media anual del estado de la mar (altura del oleaje) para la zona marítima de Cabo de Palos es la siguiente: 35% de marejadillas (0,1- 0,5 m) y marejadas (0,5-1,3 m), 28% de fuertes marejadas (1,3-2,5 m) y 28% de rizada (0-0,1 m) y calmas (0 m).

Estado de la mar según la altura del oleaje y su denominación

Altura de las olas (en metros)

Denominación

0 Calma - Llana
0 - 0.10 Calma - Rizada
0.10 - 0.50 Marejadilla
0.50 - 1.25 Marejada
1.25 - 2.50 Fuerte Marejada
2.50 - 4.00 Mar Gruesa
4.00 - 6.00 Muy Gruesa
6.00 - 9.00 Arbolada


     El número medio mensual de días en que la mar proviene de cada cuadrante para la zona marítima de Cabo de Palos queda reflejada en el gráfico 1, resultando los porcentajes medios por cuadrantes siguientes: del primer cuadrante procede un 21% de las veces, del segundo un 6%, del tercero un 16%, del cuarto un 23% y es confusa en un 34% de las veces.

     No todos los tramos de la costa de la Región se ven afectados por igual con cada una de las direcciones del oleaje.

     El tramo comprendido entre El Escull del Mojón y Cabo de Palos se ve especialmente afectado por el oleaje del NE y del E, siendo frecuentemente temporales de gran intensidad, especialmente los del E por el importante fetch con el que se han podido originar (figura 4).

     En el tramo Cabo de Palos a Puerto de Mazarrón el oleaje del E no incide directamente y tiene, por tanto, mucha menor importancia. En cambio, son los procedentes del SE y SO (lebeches) los de mayor incidencia, especialmente el del SO por su mayor intensidad, al desarrollarse con un mayor fetch, y frecuencia (figura 4).

Gráfico 1. Distribución anual de la dirección del oleaje por cuadrantes (según datos del S. Meteorológico Nacional)

Gráfico 1. Distribución anual de la dirección del oleaje por cuadrantes (según datos del S. Meteorológico Nacional)

     En el tramo siguiente, del Puerto de Mazarrón a Punta Parda, además del oleaje del SE y SO, cobra otra vez importancia la incidencia del oleaje de Levante (E). Todo el tramo de Cabo de Palos a Punta Parda está muy expuesto al oleaje del S, que aunque poco frecuente, cuando se presenta puede hacerlo en forma de fuerte temporal.

Juan Carlos Calvín