Clase Echinoidea

Los equinoideos son los comúnmente conocidos erizos de mar. Como el resto de equinodermos son invertebrados marinos con: endoesqueleto de naturaleza calcítica, un conjunto de órganos exclusivos de este filo (el sistema ambulacral) y simetría pentámera, aunque en algunos grupos se ha reducido parcialmente a bilateral. Este grupo que da nombre al filo de los equinodermos, por poseer el cuerpo cubierto de espinas (radiolas), apareció en el Ordovícico.

Su caparazón (teca) está formado por la unión de placas poligonales de calcita dispuestas en 20 columnas de placas meridianas, que van desde el polo aboral (superior), hasta el polo oral (inferior). En el primero se localiza el sistema apical compuesto por 5 placas genitales (una de ellas diferente a las demás llamada madreporito) y 5 placas oculares. Estos conjuntos de placas pueden rodear al periprocto, donde está situada la abertura anal. Mientras que en el polo oral se sitúa el peristoma (abertura bucal), que en erizos más evolucionados se desplaza en sentido contrario al desplazamiento del periprocto. Cada dos columnas contiguas, de placas semejantes, dan lugar a un área, que puede presentar poros para la salida de los pies ambulacrales (áreas ambulacrales) o no (áreas interambulacrales).

Las espinas (radiolas o espículas) son movidas a voluntad por el animal y se articulan sobre un tubérculo semiesférico denominado mamelón, perforado o no, que puede estar rodeado por una foseta (zona escrubicular) y por mamelones secundarios. En algunos equínidos existen bandas denominadas fasciolas, donde se insertan espinas de reducido tamaño, relacionadas con la respiración o la alimentación.

Criterios de clasificación

Los equinoideos se clasifican en función de:

El tipo de simetría: Pentámera (endocíclicos o regulares) o bilateral (exocíclicos o irregulares).

La posición del periprocto (ano) y del peristoma (boca).

La forma, número y disposición de las placas (oculares y genitales) que forman el sistema apical: dicíclico, monocíclico o exocíclico (pentabasal, tetrabasal, Monobasal,…).

Presencia o no de linterna de Aristóteles y tipo de aurículas.

Distribución y tipo de mamelones y zonas escrubiculares.

La existencia y tipo de faciolas.

La disposición, tamaño y forma de las áreas ambulacrales: regulares, semipetaloideas o petaloideas.

El tipo de placas ambulacrales.

Los tipos de poros ambulacrales.

La morfología de las radiolas y la distribución y tamaño de los mamelones.

Equinoideos regulares o endocíclicos

Dentro de este grupo se incluyen los erizos de mar que estamos acostumbrados a observar en las zonas rocosas de nuestro litoral. Se trata de equinodermos fundamentalmente herbívoros, que poseen un caparazón más o menos esférico, achatado en los polos y de contorno circular y simetría pentarradiada. Estos equinoideos poseen el periprocto en el polo superior (aboral) rodeado por el sistema apical y el peristoma en el polo inferior (oral), que rodea a la linterna de Aristóteles, en la cual hay 5 dientes.

Actualmente existen diversas especies en nuestras costas, siendo las más conocidas: Arbacia lixula, Paracentrotus lividus, Echinus acutus, Sphaerechinus granularis y Cidaris cidaris. Mientras que los restos fósiles de numerosos equinoideos regulares pueden ser observados en gran parte de la región, destacando las cuencas neógeno -cuaternarias de Mula, Lorca, Fortuna, Águilas y Murcia. Y los afloramientos y cretácicos de Jumilla y Moratalla.

Algunos de los taxones más abundantes en la región son morfologías cidaroideas (Cidaris, Paracidaris, Rahbocidaris, Sterocidaris y Balanocidaris, Salenia,…), que se pueden localizar en formaciones geológicas con edades comprendidas entre el Jurásico y la actualidad. Así como otras pertenecientes a los géneros: Psammechinus (que aún persiste en el océano Atlántico y mar Cantábrico: P. miliaris y P. microtuberculatus), Tetragramma (en el Cretácico de Fortuna, Jumilla y Moratalla) o Schizechinus (muy común en el Mioceno superior y Plioceno).

Cidaroideos: Equínidos de caparazón subesférico, deprimido, con grandes placas interambulacrales provistas de un gran mamelón perforado y rodeado por una foseta muy marcada y áreas ambulacrales sinuosas y estrechas compuestas por dos columnas de placas simples con un par de poros, sin mamelones. Sistema apical pequeño y monocíclico. Peristoma grande. Radiolas grandes y gruesas con formas diversas en función del género y de la especie. Triásico-actual. En la región aparecen numerosos restos desde el Jurásico hasta el Plioceno. En función de la morfología de sus radiolas se diferencian varios géneros.

Salenia: Caparazón subesférico, pequeño, normalmente menor de 2 cm. Ambulacros rectos, con dos o tres pares de poros en cada placa compuesta y un mamelón primario imperforado y crenulado. Sistema apical de grandes dimensiones que sobresale del caparazón y radiolas primarias anchas y curvadas. Relativamente abundante en el Cretácico inferior de Jumilla.

Tetragramma: Caparazón subesférico deprimido con sistema apical pentagonal relativamente grande. Ambulacros rectos con placas diademoides. Áreas interambulacrales con unas 4 filas de mamelones primarios. Espículas cortas y finas. Jurásico superior - Cretácico.

Psammechinus: Caparazón subesférico deprimido especialmente en la zona aboral con sistema apical pentagonal pequeño. Ambulacros rectos con 4 filas de mamelones primarios y placas trigeminadas. Áreas interambulacrales con 4 filas de mamelones primarios, más grandes que los del área ambulacral. Espículas cortas y finas. Mioceno – actual.

Schizechinus: Caparazón subesférico achatado con polo oral deprimido y sistema apical pequeño, hemicíclico en el que solo la placa ocular I está en contacto con el periprocto. Mamelones imperforados y áreas ambulacrales rectas, muy estrechas con placas trigeminadas echinoides, con 2 series de mamelones primarios alternantes. Áreas interambulacrales anchas, con 6 series o más de mamelones primarios. Mioceno-Plioceno de la región.