Fórmula química: CaCO3
Clase: Carbonatos.
Sistema cristalográfico: Rómbico.
Hábito: Prismático piramidal, acicular o prismas pseudohexagonales.


Propiedades físicas

Color: Incoloro, blanco, rojizo, violeta, verde; normalmente translúcido.
Color de la raya:
Blanco.
Brillo:
Vítreo, a veces nacarado.
Dureza:
3,5 a 4 (Semiduro, se raya con púa de acero).
Densidad:
2,95 g/cm3 (Entre ligero y poco pesado).
Otras:
El color no suele ser uniforme, aclarándose hacia el exterior.


Cómo reconocerlo

Es un polimorfo de alta presión y temperatura de la calcita. Aunque cristaliza en el sistema rómbico y la calcita en el trigonal, poseen semejantes características físico-químicas, por lo que difícilmente se distinguen los ejemplares masivos de estas dos especies minerales entre sí. Efervece con ClH al 10% en frío en menor medida que la calcita, carece de exfoliación romboédrica, lo que permite distinguirlo de ejemplares prismáticos de calcita. Cuando aparece bien cristalizado posee morfologías prismáticas, comúnmente estriadas en sus extremos; aciculares y tabulares. Los prismas más comunes son pseudohexagonales, que en realidad son maclas donde se unen tres prismas rómbicos. A su vez estas maclas suelen combinarse entre sí originando agregados de gran belleza.

Ambiente de formación

El aragonito es menos estable que la calcita y mucho menos corriente pero tiene una génesis muy variada. Mineral diagenético en materiales evaporíticos triásicos; en rocas esquistosas con carbonatos, ya que es el polimorfo de alta presión y baja temperatura de la calcita; en rocas afectadas por hidrotermalismo y en yacimientos metálicos diversos. En los espeleotemas de las cuevas calcáreas, los mejores ejemplares de aragonito excéntricos del mundo están en Cantabria, en la Cueva del Soplao. En ambientes sedimentarios marinos y restringidos, junto a yeso y celestina.

Forma parte del esqueleto de muchos organismos (moluscos, cefalópodos, corales, etc.) y de las perlas. Aunque suele transformase en calcita al crecer la concha y durante el proceso de fosilización.

Localidades

Aparece citado en diversas zonas mineras de Murcia, pero los ejemplares macrocristalinos son relativamente escasos. En las zonas de oxidación de los yacimientos metálicos, es decir en el gossan de La Unión-Cartagena, se localizan cristales aciculares y prismático-piramidales de diámetro milimétrico, incoloros o blancos. Los ejemplares más representativos de esta zona, muestran hábitos coraloides que se denominan flos ferri (flor del hierro).

En las mineralizaciones de hierro de Almendricos (Lorca) y Puerto Lumbreras aparecen formas fibroso-radiadas, botroidales y prismáticas, incoloros o con coloraciones claras en tonos verdosos o azulados.

Usos

Dada la escasez de yacimientos explotables, su principal utilidad se basa en su interés científico, como objeto de decoración o coleccionístico. Cuando aparece en grandes cantidades, las variedades compactas y alabastrinas se utilizan en decoración, escultura o en vidrieras.

¿Sabías qué?

Es un mineral con un nombre de origen español y además representa a España en todo el mundo.Werner en 1797, le dio su nombre a partir de ejemplares procedentes de la localidad de Molina de Aragón (Guadalajara), municipio que atribuyó erróneamente a Aragón.

Pero la primera vez que se describe este mineral fue en el año 1754, en el libro Aparato para la historia natural española del Cronista General de la Orden Seráfica, P. Fray Joseph Torrubia, que dice: "Continuando, digo, que en Molina de Aragón, a la otra parte de los Batanes y Molino que en el río Gallo tiene Don Pablo de la Muela, hay un Montecillo, donde entre la misma tierra se cogen muchísimos cristales~exágonos (a los que allí llaman Torrecillas), de los que en menos de cuatro minutos, juntó un muchacho porciones considerables. Son alvicantes, y en el centro muestran muchos de ellos los colores del Iris... Son así mismo hexágonos otros cristales de color rojo, que se hallan entre Anchuela y Clares, en un sitio cuatro leguas distante del mismo Molina, y de la misma calidad, los que el año 1719 hallé yo en las Heras de una Hacienda que tienen los Padres Cartujos de Xeréz, en el camino de Arcos, que, según quiero acordarme, llaman la Peñuela".

El naturalista Pedro Castro Barea escribió en 1919 la publicación Los aragonitos de España donde dice: "desde principios del siglo XVIII han constituido los ejemplares de esta especie, procedentes de Molina de Aragón, una de las joyas más apreciadas por los coleccionistas de objetos naturales; primero con el nombre de apatito, después con el que hoy lleva, derivado de la localidad clásica española, era uno de los principales elementos con que España enriquecía los gabinetes de Europa".

Antonio del Ramo
Francisco Guillén