José Antonio López Espinosa
Planta perenne, crasa, con varios tallos, en ocasiones solitarios, pero con frecuencia agrupados, gruesos, cactiformes, de 0,5-1,5 cm de ancho y hasta 25-30 cm de altura, asurcados cuatro o cinco veces. Hojas testimoniales, de 1-3 mm, disciformes, sólo en los tallos jóvenes o rebrotes, por lo común ausentes. Flores pentámeras, habitualmente agrupadas, numerosas, al final de algunos tallos, de 7-10 mm de diámetro, con piezas florales oscuras, purpúreas, lineares, inicialmente como paralelas entre sí, casi patentes, después en ángulo, de aproximadamente 45 grados, rematadas en ápice final, agudo y a menudo blanquecino. El fruto es un bifolículo alargado, de 7-10 cm, que contiene semillas provistas de un penacho de pelos, para su dispersión por el viento.
Hábitat y distribución
Especie iberoafricana, distribuida por el suroeste del Mediterráneo (España, Marruecos y Argelia), en Europa exclusiva de cuatro provincias del sureste peninsular: Albacete, Alicante, Murcia y Valencia. En la Región de Murcia se conoce de los municipios de Abanilla, Calasparra, Caravaca, Jumilla, Moratalla y –desde 2005– Cartagena, en una localidad puntual y disyunta (Peñas Blancas), donde se encuentra en laderas soleadas de zonas cálidas con espartales y tomillares, creciendo en pedregales y fisuras de grietas entre rocas y litosuelos calizos.
Observaciones
Como ocurre con una especie próxima y similar, Caralluma europaea, las flores de esta planta desprenden un olor poco agradable a podrido o a descomposición, para atraer a sus polinizadores, principalmente himenópteros (moscas). Curiosamente, el nombre común está muy extendido, sobre todo por su utilización en folletos y guías divulgativas, aunque la planta pasa prácticamente desapercibida y apenas se conoce en los pueblos cercanos donde se localiza, para los que –además– carece de cualquier utilidad.
Las poblaciones del sureste de la Península Ibérica se han adscrito tradicionalmente a la subespecie endémica hispanica, descrita en 1898 por Coincy como Boucerosia hispanica. La localidad clásica, murciana, indicada por el botánico como “Calar de Mina”, a la que corresponderían las primeras referencias peninsulares de esta asclepiadácea, aún puede visitarse en las proximidades de Caravaca, donde se podría decir que, puntualmente, es tan frecuente como otras plantas.
Taxón incluido en la categoría “Vulnerable” en el Catálogo Regional de Flora Silvestre Protegida de la Región de Murcia (Decreto 50/2003, BORM núm. 131), e igualmente en la Lista Roja de la Flora Vascular Española (Moreno, coord. 2010), con el nombre Apteranthes munbyana subsp. hispanica, y criterio de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza –UICN– para el territorio español: B2ab(i,ii,iii,iv,v).
La población de Peñas Blancas (Cartagena), detectada por José María Bermudez en 2005, se localiza disyunta respecto a las del interior, en territorio o distribución que correspondería a otro chumberillo de lobo, a Caralluma europea. Podría explicarse su excepcionalidad por razones climáticas locales, a la posibilidad de que a la altitud donde se encuentran los individuos (500 m sobre el nivel del mar) puedan producirse heladas, circunstancia que no parece tolerar Caralluma europea y sí C. munbyana.
José Antonio López Espinosa
