Bajo este nombre se recogen un total de 89 zonas con elevado valor botánico conocidas como Microrreservas Botánicas, resultado de un estudio realizado entre la Universidad de Murcia y la Dirección General del Medio Natural de la Comunidad Autónoma de Murcia.
Cada microrreserva ha sido seleccionada por presentar una gran riqueza de plantas endémicas, amenazadas y/o raras en la Región de Murcia. Esto no resulta sorprendente en una región donde se concentran más de 375 endemismos de la Península Ibérica y más de 250 iberoafricanismos.
Las Microrreservas Botánicas se encuentran distribuidas por toda la Comunidad Autónoma, si bien, cabe destacar su especial concentración en las comarcas del Noroeste (sobre todo en el término de Moratalla),Sierra Espuña, Yecla y toda la zona litoral.
Dentro de cada Microrreserva aparecen diferentes especies que pueden no ser raras en otros lugares pero sí lo son en Murcia, por ejemplo, los “Alcornoques de Doña Elena” en la Sierra del Cuchillo, los arces (Acer granatensis) y mostajos (Sorbus aria) presentes en el “Arroyo y dolomías del Cantalar” (Moratalla), el durillo dulce o guillomo (Cotoneaster granatensis) que hay en el “Morrón de Alhama-Valle de Leiva” o el “Quejigar termófilo de Carrascoy”.
Otras son bastante restringidas en Europa, como por ejemplo la Fumana fontanesii que habita en el “Matorral de fumana de Desfontaines” en Sierra Espuña, cuya otra única localidad europea se localiza en Córdoba. También la conocida sabina de Cartagena (Tetraclinis articulata) encuentra en las sierras de Cartagena su única población europea natural, en la microrreserva “Sabinar de ciprés de Cartagena” donde se puede apreciar esta especie junto con el endemismo local zamarrilla de Cartagena (Teucrium carthaginense).
Siguiendo en la costa, aparece en Águilas el “Matorral de gusanera” (Sideritis lasiantha) acompañado de otro endemismo murciano-almeriense, la zamarrilla lanuda (Teucrium lanigerum). En el otro extremo de la costa murciana, en San Pedro del Pinatar, todavía es posible encontrar un reducto de sabina costera (Juniperus turbinata), en la microrreserva “Sabinar de sabina costera”, junto con tamarilla del Mar Menor (Helianthemum marminorense), un endemismo del Sureste ibérico, y otras especies de interés como la llamativa azucena de mar (Pancratium maritimum).
Notable, sin duda, es la variedad de orquídeas de la región, un ejemplo de ello se encuentra en los “Pastizales y roquedos de Los Lages”, donde se pueden encontrar orquídeas tan atractivas como la Barlia robertiana, Orchis collina, Ophrys fusca, Ophrys tenthredinifera, etc. En el mismo lugar se pueden ver especies rupícolas como los zapaticos de la virgen (Sarcocapnos enneaphylla) y la flor de la estrella (Lapiedra martinezii).
Con esta pequeña muestra se pretende animar al visitante de los campos y montes murcianos a pararse a contemplar no sólo el paisaje general, sino también la rica, variada y rara flora que ofrece la región.
