En el año 1935 se celebró la primera edición de la Vuelta Ciclista a España, organizada por el diario madrileño Informaciones. La carrera, que estaba dividida en 15 etapas y tenía un recorrido de 3425 kilómetros, se disputó entre los días 29 de abril y 15 de mayo, con salida y final en Madrid.

    Los creadores de la carrera tenían ante sí el difícil reto de organizar un recorrido por toda la geografía española. El mayor inconveniente era que la prueba requería la creación de comisiones organizadoras en las ciudades que acogieran la salida y la llegada de las etapas.

Murcia acoge la prueba

    Una vez elaborado el recorrido de la prueba el Gobernador Civil de Murcia, Carlos Rodríguez Soriano, recibió la comunicación de que los organizadores habían decidido que la Vuelta Ciclista a España llegara a Murcia y brindaban la posibilidad de que la ciudad organizara el final de la novena etapa y la salida de la décima.

    El anuncio de la llegada de la Vuelta Ciclista a España causó una gran expectación entre todos los sectores de la población murciana. Las autoridades aceptaron que la ciudad acogiese la prueba y dieron los primeros pasos para constituir un comité organizador. El 20 de marzo se reunieron los representantes de las principales entidades culturales y deportivas de la ciudad en la sede del Gobierno Civil. En la reunión se acordó la creación de una ''Comisión Pro Recibimiento'' que estaría coordinada por la Peña Ciclista de la ciudad. Se nombró como máximo responsable de la comisión al presidente de la Federación Murciana de Atletismo, Miguel Ángel Cremades, una persona muy vinculada al deporte, que en años atrás habia contribuido al desarrollo del fútbol en la ciudad. Cremades había ostentado en distintas etapas las presidencias del Real Murcia y de la Federación Murciana de Fútbol.

Reunión con los representantes del diario Informaciones

    El 5 de abril, el periodista Clemente López-Dóriga, principal impulsor de la carrera, se desplazó a Murcia junto a otros dos compañeros del diario Informaciones para reunirse con los miembros del Comité Organizador con el fin de acordar todos los detalles sobre la llegada de la prueba. En este encuentro se decidió que la etapa acabara en las inmediaciones del Parque Ruiz Hidalgo, en los alrededores del Puente Nuevo, un lugar céntrico y al que los ciclistas podían llegar por una carretera ancha. Los representantes del diario Informaciones pidieron a los organizadores que levantaran una tribuna junto a la meta para la ubicación del juez de llegada, el cronometrador y un ayudante de éste.

    El día antes de la carrera los organizadores instalaron varias tribunas en el paseo de la orilla del río para el acomodo del público y establecieron un puesto de refresco exclusivo para los ciclistas frente al Cuartel de Exploradores. Todo estaba preparado para que la ciudad de Murcia acogiera a los corredores de la primera edición de la Vuelta Ciclista a España.