La Fachada Principal

La fachada Sur constituye la fachada principal de esta iglesia, que destaca por su austeridad y por su altísima espadaña, que se eleva muy por encima del resto del edificio. A pesar del estilo renacentista de la iglesia original, esta fachada es una obra barroca datable estilísticamente en la primera mitad del siglo XVIII. La altura de esta portada está relacionada con el desnivel existente entre la iglesia y la calle Camino Real, de manera que una gran espadaña serviría de reclamo visual.

En la parte inferior de la fachada se abren tres vanos de acceso, donde el central, mayor que los laterales, es el que conduce al interior de la nave. La puerta de la derecha, da acceso a la capilla del Cristo Yacente; y la de la izquierda, que comunica con la actual subida al coro, en la actualidad está tabicada, quedando sólo la reja superior que cierra el arco.

En la fachada también se distribuyen, simétricamente respecto al eje vertical, varias ventanas rectangulares, de las cuales la de mayores dimensiones da luz al interior del coro, existiendo a modo de remate una cornisa de líneas quebradas y espadaña (coronada por frontón triangular y veleta), de un solo vano para la campana.

La Fachada Oeste

En el extremo Oeste de la Capilla de la Virgen de las Angustias, llaman la atención los dos contrafuertes cilíndricos que forman las esquinas del camarín. La cubierta de la iglesia de San Francisco es completamente a dos aguas, al igual que la de la Capilla-iglesia, donde sobresalen las pirámides del crucero y el camarín.

La Fachada Este

La fachada Este de la iglesia ha surgido como consecuencia del derribo de las edificaciones colindantes del antiguo convento, ya que este muro era el que formaba medianera. Existen contrafuertes adosados a este elemento sustentante para suplir la acción del antiguo edificio derribado.

El Interior

La iglesia tiene planta de cruz latina, consta de una sola nave de 35 m de longitud por 8 de anchura, con capillas a los lados, siendo más profundas las del lado del Evangelio, mientras que las del lado de la Epístola se asemejan más bien al tipo capillas-altares.

Se divide en cuatro tramos de nave, crucero o transepto y presbiterio. A los lados de la entrada existen dos pequeñas capillas: La del lado del Evangelio, que actualmente sirve para acceder al coro. A su lado se encuentra el ingreso a la Capilla de las Angustias.

La del lado de la Epístola solo es accesible desde el exterior; la imagen del Cristo Yacente se deposita aquí en Viernes Santo. En el lado del Evangelio existe otra capilla denominada Capilla de la Comunión, o de los Portillos, que se sitúa después de la de las Angustias.

El coro, a los pies de la iglesia, se asienta sobre una bóveda muy rebajada, y está rodeado por una sencilla sillería de madera. Sobre aquel emerge una sala de juntas, se trata de una sencilla estancia rectangular, con dos ventanales que abren a la fachada principal de la iglesia. El acceso a estos cuerpos superiores, incluido el coro, no se realizaba desde el interior de la iglesia, sino desde el convento contiguo, lo que ha ocasionado que, con la desaparición de este edificio, estas estancias queden incomunicadas con la iglesia, aunque para el coro se habilitó un nuevo acceso.

La iglesia de San Francisco se cubre con bóveda vaída sobre arcos fajones. Estos se apoyan en pilastras adosadas de orden dórico sobre pedestales. Las bóvedas vaídas están divididas por molduras superpuestas que las emparentan a bóvedas de crucería. El interior de la iglesia está enlucido en blanco y las molduras pintadas en gris en la nave y de azul en las capillas.

El presbiterio, pequeño, sobre graderío, tiene planta rectangular. En el muro testero tiene abierta una hornacina en el centro con un pequeño camarín, el de San Francisco, que sobresale al exterior. A los lados del camarín se sitúan los camarines de la Purísima y de San Pascual, siendo utilizado éste último como sacristía tras la desaparición de la originaria.

La Capilla de la Virgen de las Angustias

La Capilla de la Virgen de las Angustias, de principios del siglo XVIII, es una joya del barroco levantino con un admirable camarín de azulejería valenciana, con columnas salomónicas que centraban la imagen titular y una bóveda colgante de cuatro arcos de medio punto convergentes. La capilla constituye una pequeña iglesia en sí misma, con nave principal, capillas entre los contrafuertes y cúpula sobre el crucero.

Distintas Zonas del Templo

De todas las partes reseñadas en el apartado de arquitectura la auténtica joya tardobarroca es la Capilla de la Virgen de las Angustias que se abre, en sentido transversal, sobre la primera crujía del lado del Evangelio. Presenta planta de cruz latina cubierta con bóveda de cañón, cúpula sobre el crucero y presbiterio en la cabecera, a la que se adosan una sala de juntas o antecamarín, el camarín y la sacristía. La nave central consta de tres crujías y a la altura de la segunda y tercera se abrieron a cada lado, y comunicadas entre sí, sendas capillas, que datan de principios del siglo XIX.

Pieza singular es el camarín, de planta cuadrada, obra del arquitecto, además de escultor y pintor, José Gonzálvez de Coniedo, que simula un baldaquino templete de estilo rococó fechado en el interior en 1767. En las esquinas se disponen columnas salomónicas elaboradas en yeso que sustentan el apeo de una falsa bóveda de nervios ojivales que confluyen en una clave pinjante dorada.