Órgano [Iglesia San Sebastián de Ricote]
Órgano

    En su interior el inmueble alberga tesoros artísticos como el grupo escultórico de San José con el Niño (1746), obra de Salzillo, un órgano (donación de la familia Llamas) fabricado en 1743 por José Meseguer y restaurado posteriormente por Luis Magaz, y la pila bautismal (procedente de la Ermita de Ntra. Sra. de las Huertas) en cuya inscripción figuran la fecha de ejecución de 1683 y su mecenas, el clérigo Felipe de Hoyos.

    Además la iglesia posee una amplia dotación de ornamentos litúrgicos, sin olvidar la pintura mural primitiva, recuperada por el ciezano Antonio Martínez Milanés. Por ejemplo los óleos de las pechinas (1742) representando a los cuatro evangelistas, costeados por miembros de la antigua familia Llamas; y la composición pictórica del testero del presbiterio (encargada en 1961) que enmarca la imagen del santo patrón y ocupa el espacio que antaño perteneció al retablo hoy desaparecido, fue realizada por el pintor lorquino Manuel Muñoz Barberán y representa la glorificación de San Sebastián.

    En una de sus capillas laterales se encuentra el conjunto de la Virgen Niña, atribuida a Francisco Salzillo, con San Joaquín.

    Por último hacer una breve reseña relativa a San Sebastián (Madera policromada, de autor anónimo, obra del siglo XVIII), santo vinculado a la protección de las enfermedades contagiosas y epidemias configurándose junto a San Roque, San Fabián o San Gregorio Ostiense como taumaturgo y protector contra cólera y pestes.

    Existen en la Región de Murcia numerosas construcciones realizadas bajo la protección de dicho mártir. Por ejemplo en territorios de la Orden de Santiago destacan casos como la ermita de San Sebastián en Cehegín o Caravaca. La escultura que preside el altar mayor responde exactamente al momento en el que el santo es asaeteado, semidesnudo, con las manos atadas a un tronco, a la manera de un héroe clásico cristianizado.