Exterior del Ayuntamiento de Moratalla [Ayuntamiento de Moratalla]
Exterior del Ayuntamiento de Moratalla

De planta cuadrada, el edificio exento se divide en tres pisos y sótano. Tanto en altura como en su división horizontal, sigue una jerarquía clásica en la que la calle central, al albergar el balcón principal del edificio, da la sensación de quedar adelantada a los demás edificios.

Este esquema que acabamos de definir se repite en las cuatro fachadas del edificio, observándose pequeñas variaciones en las ventanas o balcones de forja en los lados que no poseen entrada. Así, en alguna de las fachadas podemos observar óculos, o grandes ventanales redondos.

El tejado a cuatro aguas, cubierto con teja, muestra en su azotea, y como remate, una pequeña torre de planta cuadrada y ventanales que ofrece el mismo aspecto austero de todo del edificio.

A la sencillez de formas se ve unida la sobriedad de las calidades del exterior de este Ayuntamiento. Con un zócalo de piedra que marca los estrechos ventanales del sótano, la ornamentación se limita al almohadillado de piedra de las esquinas y a los marcos de ventanas y balcones.

El balcón principal del edificio se ve enmarcado con los escudos en piedra de la ciudad de Moratalla y el de la Región de Murcia. Elementos decorativos que marcan el carácter oficial de esta arquitectura.

De la edificación original se conservan el escudo de armas de la villa y un reloj de sol.

En el interior, todos y cada uno de los pisos y planta baja están destinados a despachos y oficinas administrativas. Tras las distintas remodelaciones se han intentado conservar los elementos propios de los interiores del estilo conocido como barroco popular, salvando, claro está, la funcionalidad que, hoy día, necesitan estas construcciones. Así, podemos admirar las contraventanas interiores de madera, la forja de las barandas de las escaleras, el mármol y las líneas marcadas de los arcos rebajados y las viguetas interiores que dividen las estancias y ámbitos del interior de esta Casa Consistorial.

Como detalle anecdótico, pero importante para la memoria histórica de Moratalla, debemos señalar que en el despacho del Alcalde se puede ver, en un lugar destacado, ¿La Carta de Privilegios de 1440¿, una serie de concesiones otorgadas a la ciudad que supondrían un avance en la vida autónoma y cotidiana de este municipio.

García García en su informe al Ayuntamiento dice que la  primera edificación elegida por el Concejo se utiliza con diferentes arreglos a lo largo de los siglos van a llegar cumpliendo su cometido hasta el primer tercio del siglo XX.

En su fachada que da a la Calle Mayor se colocaron en el siglo XVIII las armas de la Villa y, posteriormente, un reloj de sol, que aún mantienen.