El Palmar

  A fines del siglo XVI se estimaba su población en unos 30 vecinos. Además, en 1583 se diferenciaban dos lugares poblados: la Torre de Verástegui, en la falda de la Sierra del Puerto, y El Palmar. En el siglo XVII El Palmar experimentó un aumento poblacional. Se inició en 1615, cuando el regidor de Murcia y señor del lugar, llamado también don Juan Verástegui (y casado con doña Lucrecia Lisón), dictó medidas para atraer población. En 1614, El Palmar fue erigido parroquia por el obispo don Francisco Martínez de Cisneros, que incluyó en su jurisdicción Aljucer, San Ginés, Sangonera la Verde y Sangonera la Seca. La parroquia se estableció en el templo de la Purísima, concluido en 1615 a instancias de don Juan Verástegui.

  En el siglo XVIII, ante la falta de descendencia de la familia Verástegui, El Lugar de Don Juan pasó a pertenecer al linaje de los Lucas. Más tarde, en esta misma centuria se convirtió en lugar de realengo con alcalde ordinario, dentro del Partido de Murcia. A finales del Setecientos, el Conde de Floridablanca promovió las obras del Camino Real de las Cadenas. Éste pasaba por la antigua Vía Augusta de época romana, uniendo en su primer tramo la ciudad de Murcia con El Palmar.