El Yacimiento Paleontológico de la Sierra de Quibas puede ser, si se confirman en las excavaciones los rumores de algunos científicos, uno de los yacimientos con los restos humanos más antiguos de España y de Europa. Unos excursionistas encontraron de modo casual, en una vieja cantera abandonada de la Sierra, unos fósiles a finales de 1994 y se los entregaron a un Grupo Paleontológico de Elche (Alicante). Años más tardé se constató la importancia del hallazgo y el lugar de la cantera donde se encontraron los restos fue declarado Bien de Interés Cultural. Este yacimiento resulta tan interesante paleontológicamente por tres razones:
-Su edad (finales del Pleistoceno Inferior, de 1'3 a 1 millón de años).
-Su abundante y variada fauna (más de 60 especies de reptiles, mamíferos, anfibios y aves).
-Por la posibilidad de encontrar los restos humanos más antiguos de España.

   La cultura argárica

   Apenas está documentada la información sobre la Prehistoria de Abanilla, al no haber sido excavado sistemáticamente ninguno de sus yacimientos. Sí se han hallado pequeños objetos de sílex y piedras pulimentadas en La Umbría y El Partidor, datados en el periodo prehistórico del Neolítico. La Edad del Bronce, entre 1.800 y 1.100 a. C., dejó en Fortuna el yacimiento de El Morterico, cercano al Lugar Alto. En él fueron encontradas dos hachas de diorita y una serie de fragmentos cerámicos. El uso del metal en sus herramientas y el modo de los enterramientos hallados vinculan a esta zona con la cultura argárica. La forma de enterramiento era la inhumación individual. El cadáver se introducía en cistas o urnas, encogido sobre las rodillas, acompañado de un ajuar funerario.

   Los íberos en Abanilla

   La cultura íbera, que se extiende por la Península a lo largo de la segunda mitad del primer milenio a. C., dejó su huella también en Abanilla. Se han documentado una serie de poblados en Mafraque, Azud de El Partidor, El Olivar y el Lugar Alto. En este último se halló un 'pilum' o lanza de hierro, de gran poder ofensivo, y varios fragmentos de vasijas con decoración geométrica. En el Llano de Sahués se encontró una escultura de terracota representando el torso de una dama.