Tomando la carretera vieja que va desde Mazarrón a Águilas nos acercamos a varios pequeños núcleos urbanos poblados de montañas y de diminutos valles que nos llevan hasta el mar.

Ifre es una de las elevaciones más conocidas, desde la que se observa el mar y la huerta de Lorca y Mazarrón. En su cima se hallan los restos de una torre medieval y un casi inexistente ya poblado ibérico. Mientras que al pie de sus laderas se encuentra la conocida como la noria de Ifre.

Descripción

Se trata de una noria de sangre de las que se desarrollan en el campo de Cartagena, Lorca y Mazarrón. Su función primordial es llegar a grandes cotas de profundidad para poder elevar agua a la superficie y repartirla por medio de canales en la tierra que va a ser trabajada.

La particularidad de la misma, es que estas norias presentan una base elevada en forma cónica. Es decir la noria se encuentra elevada del suelo gracias a la construcción de una base cilíndrica forrada con piedras y colmata su base con tierra. En este caso estamos hablando de una noria elevada del suelo en su parte más baja unos 80  cm y en su parte más alta unos 2 m.

Esta noria se encuentra en un buen estado de conservación y mantiene las que pueden considerarse las características básicas de una noria de sangre. Contiene una rueda de 1 m más o menos de circunferencia, a ella estaba unida una pértiga de madera a la que iba unido un animal, que daba vueltas alrededor de la noria.

La rueda llevaba una cuerda en la estaban sujetos los cangilones de barro que eran los que de verdad se encargaban de elevar el agua y la dejaban en un canal que la dirigía hacia la zona del terreno que debía de ser regada.

La base es de forma cónica y tiene unos 6 metros de diámetro, terreno suficiente para que el animal de turno pudiera realizar su inacabable viaje.