La Florida

    La Florida queda encuadrada dentro de la Vega Media murciana, y es una de las áreas de está que conservan aún mayor número de hectáreas dedicadas a las tierras de cultivo, por lo que el paisaje de huerta sigue siendo predominante.

    El suelo de la zona es de carácter calizo, con un alto contenido en materia orgánica, lo que lo hace ideal para los cultivos hortofrutícolas de regadío, si bien, la escasez hídrica progresiva, y su deterioro en cantidad de minerales, va mermando sus posibilidades a este respecto.

Flora

    Como en casi toda la huerta murciana, los árboles de frutales cítricos ocupan buena parte del paisaje de huerta, si bien durante muchos años esta parte de la Vega Media se especializó en el cultivo de melocotones, y en concreto de una variedad muy sabrosa para el consumo directo, la proliferación a mediados del XX de las conserveras propició también el cultivo de esta fruta.

    Junto a los melocotoneros, los naranjos y los limones también se observan otros frutales como el granado, los manzanos y los peros, así como las higueras u otros cítricos como el pomelo.

    Junto a los cultivos de huerta queda asociada una flora propia de estos paisajes. En los huertos, bajo árboles y junto a los bancales de habas, coles, pimientos o berenjenas, siempre crecen vinagrillos, las bidens, cardos silvestres y gran variedad de gramíneas.

    Cerca de los cursos fluviales y acequias es fácil encontrar cañas, o arundo donax, muy propias de las construcciones de huerta, hiedras de campana, correhuelas, algún tamarindo y algo más alejadas las falsas tapeneras. Por lo demás, pocos son ya los olmos o aros que podemos encontrar.

Fauna

    En cuanto a la fauna de la zona, ésta queda reducida a una variedad permanente avícola de gorriones comunes, palomas, mirlos, tutvías, verderones, lavanderas y carboneros. Algunas ranas comunes siguen poblando las orillas del curso del Mula, al tiempo que las culebras de herradura también se pueden llegar a observar en algunos recovecos alejados.