La Garapacha

Berenjenas con nueces

    Las berenjenas son una de las hortalizas de temporada más populares en las cocinas de nuestra región y en la actualidad pueden encontrarse en los mercados durante todo el año. Fritas, asadas, rellenas, las berenjenas nos ofrecen un gran abanico de posibilidades.

    En el caso de esta receta la berenjena pasa, en un primer paso, por el proceso de cocción. Con este primer procedimiento vamos a conseguir que la berenjena absorba mucho menos aceite cuando la friamos a continuación.

    Por otro lado, las nueces son un elemento que enriquece considerablemente el plato, recordemos que la berenjena no es muy rica en nutrientes, sin embargo, las nueces aportan ácidos grasos poli-insaturados, zinc y vitaminas E y B que las hace muy interesantes desde el punto de vista nutricional. Además de todos estos beneficios añaden a la preparación, aparte de su sabor, una textura crujiente muy agradable.

   Ingredientes

    2 Berenjenas

    80 Gr. de nueces picadas

    Apio

    Perejil

    Aceite de oliva

    Sal y pimienta

    1 vaso de caldo de ave o verduras

    1 vaso de agua

    Elaboración

    Comenzamos la preparación del plato pelando las berenjenas y cortándolas en cubitos de un centímetro y medio de lado.

    Seguidamente cocemos las berenjenas en agua con sal unos cinco minutos.

    Mientras se cuecen las berenjenas picamos las nueces, el apio y el perejil. Las cantidades de apio y perejil se elegirán según el gusto de los comensales.

    Una vez cocidas las berenjenas las sacamos del agua y las escurrimos con cuidado.

    A continuación ponemos aceite a calentar en una sartén y freímos los cubitos de berenjena, cuando estén doradas las sacamos y las reservamos aparte.

    En la misma sartén sofreímos ligeramente el apio y las nueces. Añadimos el perejil, el caldo y el agua, si no tenemos caldo podemos utilizar sólo agua. Dejamos que hiervan un poco los ingredientes.

    Por último añadimos las berenjenas y salpimentamos al gusto. Dejaremos que se termine de consumir  el caldo hasta que estén cocidas las berenjenas. Puede añadirse más agua si fuese necesario.

    El plato estará listo para servir. Puede consumirse recién hecho o templado.