Halcón Peregrino mostrando su porte
Halcón Peregrino mostrando su porte

La zona litoral de Perín que abarca el espacio que media entre Cabo Tiñoso y La Azohía es, junto a Cabo de Palos y Cabo Cope, calificada como área de alto valor ecológico, es una de las zonas de mayor riqueza de flora y fauna en sus fondos marinos de la Región.

Los relieves de este litoral corresponden a formaciones montañosas en las que abundan los acantilados constituidos por calizas y dolomías del Triásico que van desde los 20 a los 200 metros de altura.

La costa acantilada es refugio para aves como el halcón peregrino. En islotes cercanos cohabitan pardelas cenicientas y paiños mediterráneos, especies que se alimentan de los restos de pescado que abandonan los arrastreros.

Son muy apreciadas las formaciones vegetales marinas de La Azohía, ya sean aquellas que se forman en zonas muy iluminadas como las que se desarrollan en áreas más profundas y en penumbra. Destacan las formaciones de algas verdes, pardas y rojas.

Los bosques marinos de Posidonia oceánica cubren las ensenadas y las calas, así como los arenales de la zona. Se trata de unas formaciones que resultan muy beneficiosas para la pesquería ya que entre sus cintas buscan cobijo las distintas especies faunísticas y sirven, al  mismo tiempo, de alimento.

La fauna marina de La Azohía destaca, primeramente, por ser reserva de delfines mulares, pero posee también especies como las esponjas, los cnidarios, los poliquetos, los moluscos, como la ostra roja y el pulpo, los crustáceos, como la cigarra, la langosta y el bogavante, los erizos y peces como los tordos, las coloridas o los salmonetes, estos últimos muy populares en la gastronomía cartagenera.

En las formaciones rocosas que rodean la zona comprendida entre Cabo Tiñoso y La Azohía se observan distintas especies pelágicas como la lecha y la barracuda formando grandes cardúmenes. Y en las zonas más profundas se pueden divisar predadores como los congrios, las moreras y los meros.