San Félix

  Existe una documentación escasa sobre el devenir histórico de la diputación de San Félix. El origen del topónimo tan sólo se atribuye a la posible influencia de los colonizadores de estas tierras durante el siglo XVI, momento en el que el valle de Cartagena comienza a ser repoblado.

  Vecinos de filiación aragonesa o catalana pudieron llevar a los parajes de la diputación la advocación de un santo mártir muerto en Gerona, San Félix 'el Africano', víctima de las persecuciones contra los cristianos en tierra hispana durante el siglo III. Los topónimos más antiguos refieren nombres como Casas de San Félix, Cruz de San Félix o Vereda de San Félix.

  La primera referencia a la zona se encuentra en 1604, al pago de Los Camachos y al sorteo de sus tierras entre los ganaderos del paraje. En 1623 volverá a aparecer el nombre de este lugar.  Tras un recuento de carácter fiscal en 1683 aparece el topónimo de San Félix, acompañado de los parajes de Ventura, Riscales, Camachos y Piqueta, áreas estas últimas de ganadería que ya se habían mencionado en el siglo XVI, junto a nombres de regidores y propietarios.

  Catastro de Ensenada y Censo de Floridablanca

  Las contribuciones y recuentos aportan datos durante el siglo XVIII, figurando entre 1715 y 1717 332 habitantes y en 1771 un total de 420. Los catastros del marqués de la Ensenada (1755) y Floridablanca (1787) arrojan datos más interesantes, como la existencia de el convento de San Agustín Descalzo, un Colegio de la Compañía de Jesús y el Cabildo Eclesiástico, así como la referencia de la diputación como aldea de realengo con alcalde pedáneo.

  Durante el siglo XIX existen muy pocas citas históricas que aporten información de esta diputación. Una de ellas, en 1846, hace referencia a la calidad de las tierras de labranza de la zona. Otras dan cuenta del número de molinos de agua, un total de 11 en 1956, utilizados para extraer los recursos hídricos de los pozos, y en otras se estiman los parajes que conforman la diputación. Con la modernización de los cultivos de la zona a partir de los años 70', convirtiendo algunas áreas en cultivos intensivos de gran rendimiento gracias a las nuevas técnicas. Los niveles demográficos de San Félix se desarrollarían en un continuo ascenso.