En la zona del Raiguero se hallan distintos yacimientos arqueológicos. Los restos han sido estudiados de modo superficial, pero demuestran el paso de los pueblos prehistóricos por la pedanía hacia otros asentamientos, que contaban con una situación más favorable para ser defendidos. Entre estos enclaves vecinos que influyeron en la zona destacan el poblado del Campico de Lébor y la elevación del Cerro de Blanquizares, ambos del periodo Eneolítico (III milenio a.C.). Durante la misma cronología, la comarca del Guadalentín y la zona del Raiguero adquieren relevancia debido a la llegada de nuevos pobladores y el desarrollo de las primeras comunidades.
Edad del Bronce y Edad de Hierro: Importantes yacimientos en la zona
En las cercanías de la pedanía se han encontrado yacimientos arqueológicos muy importantes para el estudio de las sociedades prehistóricas. Entre estos asentamientos, el Cerro de La Bastida dentro de la cultura argárica y el poblado de Las Cabezuelas, que alcanzará su máximo esplendor en época íbera, serán los principales exponentes de la importancia de la zona dentro de los asentamientos prehistóricos entre los siglos III y I a.C.
