Valladolises desde Cabecico del Rey[Valladolises]
Valladolises desde Cabecico del Rey

     Valladolises se encuentra en una penillanura, a una altura media de 200 metros, sin relieves destacados a su alrededor, excepto el Cabecico del Rey, cuyo pico más alto alcanza los 198 metros de altura. Se trata de una loma al oeste de la población donde aún se pueden encontrar algunos restos minerales y estructuras de los antiguos pozos mineros de hierro.

     Por el lado oeste del Cabecico del Rey, pasa un tramo de la rambla de La Murta, que atraviesa un amplio sector de este territorio de campo desde su comienzo en Carrascoy y que atraviesa también la vecina población de Corvera.

     Las características de los parajes de Valladolises y Lo Jurado explican la agricultura tradicional de secano y su reconversión posterior a sectores de regadío, las llanuras favorecen los cultivos, que colonizan el territorio, no en vano Valladolises cuenta con un punto geodésico.

Flora y Fauna

     Los campos de Valladolises, de terrenos cuaternarios, arcillosos y con abundantes zonas pedregosas, están roturados, priman las especies naturales cultivadas. Entre los árboles de cultivo nos encontramos el almendro o el algarrobo, y entre las hortalizas y frutas, patatas, melones, alcachofas y habas, además de invernaderos dedicados al pimiento.

     Como muchas otras áreas del campo de Murcia de Cartagena, las dificultades de irrigación hídrica favorecieron la apertura de pozos y aljibes, elementos que aún se pueden encontrar en el paisaje si bien hoy día, los modernos sistemas de riego han sustituido los antiguos pozos, muchos de ellos ya secos o con altos niveles de sal.

     La flora silvestre asociada a los campos y que se extiende en la zona de rambla es, principalmente, de monte bajo, esparto, albardinar y tomillo. El ámbito de rambla incluye especies mejor adaptadas a un medio algo más húmedo, como los tarays, aunque en el tramo que pasa por Valladolises predominan los algarrobos.

     La fauna del lugar abunda en especies comunes en los campos, conejos, perdices, ratones de campo, topillos y algún esporádico zorro. Las aves son el grupo más numeroso gracias a especies casi domésticas como la paloma torcaz, la tórtola, el mirlo o la lavandera.

     Entre los reptiles destacan la culebra bastarda, la culebrilla ciega, la lagartija ibérica y las salamanquesas.