Las creaciones datan de la década de los 60 y se muestran dentro de la iniciativa 'De Paso', con la que Cultura muestra al público piezas que forman parte de colecciones privadas de la Región

El director general de Bienes Culturales, Juan Antonio Lorca, y el responsable del Mubam, Javier Bernal, junto a las obras de Manuel Rivera

El Museo de Bellas Artes de Murcia (Mubam) expone desde hoy dos obras de Manuel Rivera. Las creaciones se muestran dentro de la iniciativa de la Consejería de Turismo, Cultura y Medio Ambiente ‘De Paso’, en la que se exhiben creaciones de reconocidos autores que forman parte de colecciones privadas de la Región de Murcia.

Las obras del artista granadino, “uno de los miembros fundadores del grupo ‘El Paso’”, son ‘Metamorfosis. Huella en el espejo’ (1963) y ‘Metamorfosis. Exvoto’ (1960); “dos fantásticas muestras del trabajo realizado por Rivera con las mallas metálicas y que permanecerán expuestas a la entrada del museo hasta finales del mes de noviembre”, según explicó el director general de Bienes Culturales, Juan Antonio Lorca.

El director general explicó que “a través del ciclo ‘De Paso’, desde Cultura contribuimos a sacar a la luz obras que forman parte de colecciones privadas de la Región y que no se exponen de forma habitual, dando la oportunidad al público de disfrutar de ellas durante un breve espacio de tiempo”.

“Uno de los principales objetivos para los museos regionales es incrementar el número de visitantes atrayendo a nuevo público y fidelizando a los que ya conocen estos espacios”, señaló Lorca. Un objetivo, añadió, “al que contribuimos con la creciente programación de actividades paralelas, las iniciativas enfocadas a los más jóvenes y también gracias a pequeñas muestras de obras de gran calidad prestadas o depositadas en el museo que complementan las exposiciones temporales y la colección permanente”.

El Mubam permanece abierto de martes a viernes, de 10:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00 horas; los sábados, de 11:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00 horas, y los domingos y festivos, de 11:00 a 14:00 horas.

Trayectoria

Manuel Rivera Hernández (Granada, 1927 – Madrid, 1995) estudió en la Escuela Superior de Bellas Artes de Sevilla, de la que fue nombrado profesor en 1947, el mismo año en el que fue seleccionado para participar en la Primera Bienal de Arte Hispanoamericano de Madrid.

Su participación en el Curso Internacional de Arte Abstracto celebrado en Santander supuso un punto de inflexión en su carrera y comenzó a adentrarse en el arte abstracto con series como ‘Albaicines’. Posteriormente, incorpora la tela metálica a sus obras como soporte artístico, primero sobre bastidores de madera y posteriormente de aluminio.

En 1957, Rivera participó en la creación del grupo ‘El Paso’, un colectivo de artistas y críticos de gran relevancia que revolucionó el arte español de la posguerra y en cuya primera exposición, en 1957, presentó sus telas metálicas. Su integración en El Paso marcó su trayectoria de forma sustancial, empezando a ser conocido a nivel nacional e internacional.

Comenzó a trabajar realizando obras sobre un solo plano, a modo de collage; mallas metálicas sujetas por un bastidor de hierro. Comprobó admirado que en este soporte tenía cabida el espacio y la luz, y pronto empezó a dejar espacios entre las telas metálicas, consiguiendo así ciertas vibraciones e irisaciones que fueron el principio de su producción posterior.

Fue una composición de la serie de ‘Metamorfosis’ de 1959 la primera obra realizada sobre un tablero de madera al que sujetó las telas metálicas. El tablero servía de soporte para fijar las tramas y, sobre él, apoyaba unos pivotes de hierro que le servían de sujeción.

Desde la austeridad anterior, el color fue conquistando las sombras a partir de los años sesenta. El pintor empezó entonces a utilizar el mismo sistema de veladuras que los pintores venecianos del siglo XVI y con la luz comenzó a formar grandes masas que, junto con el color, creaban unas ondas y vibraciones de gran intensidad. Poco a poco, la obra de Rivera fue adquiriendo un carácter más constructivo, al superponer las mallas metálicas que iban creando volúmenes diversos en el espacio.