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Piense que no debe ahorrar en temas que afecten a su seguridad: Lo importante no es el precio, sino que sea un casco homologado y seguro. Antes de comprar, infórmese bien, compare precios y calidades.
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Exija que esté homologado según la normativa europea. Fíjese si lleva cosida en su interior la etiqueta de homologación.
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Para que vea bien, es mejor que compre un casco que lleve la visera clara, que no sea tintada, que no se raye y, si es posible, antivaho.
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Cuando acuda a una tienda especializada, pida que te aconsejen, y pruébese con tranquilidad diferentes marcas, modelos y tallas. Debe estar muy ajustado, pero sin apretar ninguna zona de la cabeza o el cuello. Tampoco moverse si gira la cabeza rápidamente.
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A la hora de abrocharse el cierre del casco, éste tiene que quedar perfectamente sujeto, ya que de lo contrario sería lo primero en saltar en caso de caída.
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Cuando un casco ha sufrido un golpe fuerte o se ha caído desde una altura superior a 1,50 metros puede haber sufrido daños en su estructura y haber quedado inservible. Póngase en contacto con la tienda, para que comprueben los daños.
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También es importante el resto de la indumentaria: Un buen equipo de protección individual también forma parte de tu protección y seguridad.