El legado cultural ligado al agua cedido por las anteriores civilizaciones asentadas en la Región es un rico patrimonio que ha sido clave en el desarrollo de las actividades agrícolas y en la optimización de la gestión del agua desde hace siglos.

Si hay algún ingenio hidráulico que pueda asociarse al paisaje murciano como si se tratara de una parte más del río, son las norias.